La chef del Semproniana, Ada Parellada, se adentra en las casas de los cocinillas más intrépidos de Catalunya para resolver dudas semanales sobre los productos del día a día. Desde verduras y toda clase de hortalizas y frutas, hasta cualquier tipo de dulce, pasando por la carne y el pescado. Maneras de aprovechar los alimentos en su esplendor, técnicas innovadoras y consejos que, en definitiva, nos harán disfrutar de una vida y un recetario más cómodo en los fogones de nuestro hogar. El consejo revelador que esta semana nos expone la cocinera catalana es cómo hacer creps caseras, un truco indispensable que no podrás dejar de usar

Coge libreta y bolígrafo, y dale a play al vídeo para averiguar todos los consejos de Ada Parellada de esta semana.

Las crepes son un invento francés que ha triunfado en todo el mundo. Son sabrosas, versátiles, fáciles de hacer y sacian el hambre como ningún otro plato. Además, se pueden disfrutar en la mesa de casa o caminando por la calle. Una delicia dulce, pero también salada, que te permitirá experimentar y probar cosas nuevas en la cocina de una manera fácil y con unos resultados que seguro que son exquisitos. Además, las creps gustan a los adultos, pero sobre todo a los niños; ¡son una merienda fantástica para preparar estos días de frío!

Son sabrosas, versátiles, fáciles de hacer y sacian el hambre como ningún otro plato

Ingredientes:

Creps básicas:

  • 80 g de harina
  • 200 ml de leche
  • 1 huevo
  • Sal
  • Azúcar
  • Mantequilla

¡O aún más fácil!

  • 1 huevo
  • Medio vaso de harina
  • Un vaso de leche
  • Sal
  • Una cucharada de azúcar (si queremos hacer crepes dulces)

Para el relleno salado:

  • 150 g de sobrasada
  • 100 g de queso Mahón
  • 50 g de miel

Para el relleno dulce:

  • 100 g de mermelada de naranja amarga
  • 100 g de gotas de chocolate
  • 50 g de almendra
Creps dulces y saladas. / Foto: Raquel Sánchez

Elaboración:

Hacemos la masa de las creps Simplemente mezclamos todos los ingredientes. Si vemos que nos quedan muchos grumos, podemos triturar con una batidora eléctrica. Idealmente, dejamos reposar la masa durante media hora, pero si no hay tiempo, ¡no hay problema! En una sartén antiadherente, a fuego medio, pasamos un trozo de mantequilla. Ponemos la medida de un cucharón pequeño y rápidamente giramos la sartén para esparcir la mezcla por toda la sartén. Esperamos a que se cocine por un lado, a fuego medio. Sabemos que está cocida cuando hace burbujas. Damos la vuelta a la crepe y cocinamos por el otro lado. Quizás solo serán un par de minutos por lado. Retiramos y volvemos a hacer el procedimiento. Cuando queramos hacer el relleno, volvemos a poner la crep en la sartén, a fuego lento. Ponemos la sobrasada y el queso; en el caso de las crepes saladas. Esperamos a que se funda el queso y, finalmente, acabamos con un hilo de miel. La envolvemos sobre sí misma y servimos. En el caso de las crepes dulces, ponemos la crepe en la sartén, untamos con la mermelada de naranjas amargas, ponemos el chocolate, esperamos a que el chocolate se funda ligeramente y acabamos con la almendra. La cerramos sobre sí misma y servimos.