Ir a un restaurante y encontrarse con ciertas situaciones puede resultar incómodo, sobre todo cuando creemos que están vulnerando nuestros derechos como consumidores. Sin embargo, hay algunas prácticas que, aunque puedan parecer injustas o incluso discriminatorias, son perfectamente legales en España. La clave está en los matices: siempre que el establecimiento actúe con transparencia, avise con antelación y no vulnere normas de igualdad o consumo, puede aplicar algunas medidas que muchos desconocen. A continuación te contamos tres cosas que un restaurante puede hacerte legalmente, aunque probablemente no lo sabías.
3 cosas que es legal que te hagan en un restaurante
La primera y más polémica es que pueden negarse a atenderte si vas solo. Sí, aunque parezca increíble, no existe ninguna obligación legal para que un restaurante acepte a todos los clientes, siempre que el motivo no sea discriminatorio (por ejemplo, por sexo, raza o religión). En muchas zonas turísticas o con alta demanda, los locales priorizan las mesas para grupos grandes o parejas, ya que de esta forma maximizan los ingresos por turno. Si un restaurante considera que una persona sola “ocupa” una mesa que podría generar más beneficio, puede decidir no servirle, siempre que lo haga de manera educada y sin incurrir en trato vejatorio. Es una práctica cada vez más común, sobre todo en zonas costeras y centros urbanos con gran afluencia de turistas.
La segunda situación que sorprende a muchos comensales es que pueden ponerte un límite de tiempo en la mesa. Esto también es totalmente legal, pero con una condición: deben informarte previamente. Ya sea mediante un cartel visible, una nota en la carta o un aviso al hacer la reserva, el restaurante puede establecer un tiempo máximo de permanencia, por ejemplo, 90 minutos por turno. Esta medida se utiliza especialmente en locales pequeños o en aquellos con mucha rotación, donde se busca garantizar que más clientes puedan disfrutar del servicio. Si el límite se comunica con claridad, no hay base legal para reclamar: forma parte de las condiciones de servicio del establecimiento.
El suplemento por terraza se considera un servicio adicional
Y por último, algo que genera debate cada verano: cobrar más por sentarte en la terraza. Aunque muchos lo consideran un abuso, la ley lo ampara siempre que esté debidamente indicado. El suplemento por terraza se considera un servicio adicional, ya que implica un coste extra para el local (licencia municipal, mobiliario, mantenimiento, camareros adicionales…). Por eso, pueden cobrarte más que si te sientas dentro, pero el precio debe figurar claramente en la carta o en el ticket. Si lo ocultan o no lo indican, ahí sí estarían incumpliendo la normativa.
Hay prácticas que, aunque molesten, forman parte del derecho del hostelero siempre que actúe con transparencia y respeto. Por eso, antes de indignarse, conviene recordar que en los restaurantes no todo lo que parece “injusto” es necesariamente ilegal.
