Han tenido que pasar 909 días, desde un Barça-Mallorca el 28 de mayo de 2023, para que el equipo blaugrana, con un entrenador diferente y un equipo prácticamente nuevo repleto de jugadores de la Masia, haya podido regresar al Spotify Camp Nou. Ha sido un retorno emocionante y feliz al templo blaugrana. ¡Qué caray! El estadio no está finalizado, tampoco se han podido cumplir los plazos iniciales, solo han podido entrar inicialmente 45.000 espectadores y falta la grada de animación. Pero la sensación de que podremos disponer de un estadio pensado para el siglo XXI y de que estamos al inicio de escribir un capítulo importante de la historia del club, es muy superior a cualquiera de los problemas señalados anteriormente.

Es una pena que la campaña electoral, sin fecha, de la próxima primavera, nuble la visión de los aspirantes a apartar a Joan Laporta de la presidencia del club y necesiten poner palos a la rueda a la ilusionante vuelta al estadio. Algunos han decidido que sus escasas posibilidades de ganar pasan invariablemente por una campaña electoral sucia. Lo que ha pasado esta semana en las redes sociales con la vicepresidenta Elena Fort, es muy sintomático y preocupante. Es un mal presagio que, si se sigue por este camino, puede acabar condicionando una temporada que el Barça está en condiciones de mejorar los éxitos de la temporada pasada.

En el once inicial, siete catalanes, un hecho que no se producía desde el 8 de diciembre de 1970

En lo deportivo, la jornada fue redonda. El triunfo por 4-0 frente al Athletic de Bilbao sitúa al Fútbol Club Barcelona, líder provisional, empatado a puntos con el Real Madrid, que jugará su partido de la jornada 13 este domingo frente al Elx, en campo ilicitano. Ha marcado el primer gol en el nuevo Camp Nou, probablemente el jugador que más lo merecía por su compromiso con el club y por la generosidad con la que ha cedido protagonismo a futbolistas con más futuro que él: Robert Lewandowski. En el once inicial, siete catalanes, un hecho que no se producía desde el 8 de diciembre de 1970, hace la friolera de 55 años. Otros dos jugadores catalanes entraron a lo largo de los 90 minutos, elevando aún más el listón de futbolistas del país y teniendo que buscar en las hemerotecas el lejano 31 de octubre de 1937 para encontrar una situación similar.

Aunque el final de las obras no está previsto hasta diciembre de 2027 y este sábado solo han podido asistir 45.401 espectadores, que es lo que permite la licencia 1B aceptada, se van a ir dando pasos hasta su finalización. El primer objetivo va a ser conseguir la licencia 1C, que es la que permitirá llenar completamente las dos primeras graderías y que quepan en el estadio 62.000 espectadores. Si los plazos se cumplen, en enero del próximo año, dentro de dos meses como máximo, este objetivo se conseguirá. Para la tercera galería, habrá que esperar al inicio de la temporada 26-27, y el estadio tendrá entonces su capacidad máxima de 104.000 espectadores. La cubierta se llevará a cabo entre el verano y las vacaciones de Navidad de 2027, aprovechando las semanas sin partido en el estadio. Habrá algún retraso en esta última fase, seguramente. Pero el Spotify Camp Nou ya será, para aquellas fechas, un estadio que causará admiración en Europa.