Refrescante, fácil de preparar y muy buena... ¡y una ensalada llena de vitaminas! No podemos dejar de recordar las cualidades nutricionales del aguacate, el ingrediente estrella hoy, pero de esta ensalada a mí me gustaría destacar también la escarola.
Aparte de aportar textura al conjunto, el punto de amargura de la escarola garantizará una correcta digestión cuando vayáis de dormir, ya que evitará la retención de líquidos.
Con respecto a los langostinos, es mejor utilizar frescos. En caso contrario, podéis utilizar langostinos o gambas congelados (pelados o no). De la misma manera, el aceite de oliva será un elemento a tener muy en cuenta, y el aceite Priordei utilizado en este caso ha sido todo un acierto.
Como siempre, permitidme insistir en la importancia de utilizar productos de calidad en recetas con pocos ingredientes y/o poca elaboración como esta.
El aguacate es un fruto que generalmente se utiliza a manera de hortaliza o verdura, de sabor delicado y de fácil consumo, rico en grasas monoinsaturadas, antioxidantes y minerales; aliados de nuestra salud.
Teniendo en cuenta estas propiedades nutritivas, es muy recomendable para todos los segmentos de la población: niños, jóvenes, adultos, deportistas, mujeres embarazadas, madres lactantes y personas mayores.
1 aguacate
20 langostinos frescos
queso feta en dados
un poco de escarola
el jugo de un limón
aceite de oliva virgen extra Priordei
pimienta negra
sal
Variantes:
Podéis hacerla sin queso
Podéis añadir tomate y cebolla tierna

Como os comento a la introducción, el aceite es un elemento clave en la receta de hoy. He utilizado el aceite virgen extra Priordei sin filtrar. Esta variedad tiene una caducidad corta y sólo está disponible de noviembre a mayo.
¡Extraordinario!

Además, con este pequeño formato, Priordei ofrece un tapón dispensador muy útil.

De esta manera podéis presentar el aceite directamente en mesa.

Aproximadamente tenéis que calcular unos 8-10 langostinos por persona.

Peladlos, pero reservad algunos con la cola para decorar la ensalada. El resto las haremos a trozos para mezclar.

Aprovechad para hacer un corte en el lomo de los langostino con cola, pero sin acabar de cortarlos del todo. De esta manera, al freírlo, conseguiréis que se abra y quede estéticamente más bonito para decorar.

Saladlos y pimentadlos.

Poned un buen chorro de aceite de oliva en una sartén.

Ahora, freíd los langostinos.

Veréis como enseguida cambian de color. Dadles la vuelta.

Cuando estén hechos, reservadlos.

Lavad y cortad unas hojas de escarola.

Cortáis unos tacos de queso feta o, si lo consideráis demasiado fuerte de gusto, podéis utilizar un queso fresco más suave.

Ahora preparad el aguacate. Lo cortáis por la mitad y le retiráis la semilla. Con una cuchara retirad la pulpa y la cortáis en dados.

Tirad el jugo de un limón por encima del aguacate para evitar que se ennegrezca (oxidación).

Cortad los langostinos a trozos. Yo he hecho tres de cada langostino. Recordad reservar enteros lo que tienen cola para decorar.

Mezcladlo todo con cuidado de no estropear el aguacate ni el queso, y lo regáis con aceite de oliva.

Un punto de sal y un punto adicional de pimienta negra si os gusta.

Esta ensalada se puede comer tibia o fría. Ya la podéis emplatar.

Vigilad la presentación, que siempre es importante.

¡Decorad la ensalada con los langostinos que habéis reservado y para la mesa!

¡Buen provecho!