El próximo 31 de octubre, el bar La Plata cumple 80 años de vida. Para celebrarlo, la familia Marjanet-Pascual, que ha sido propietaria del local ininterrumpidamente desde su apertura en 1945, ofrecerá barra libre de comida y bebida el sábado 1 de noviembre. De 13:30 h hasta las 15:00 h, el bar servirá sus míticas raciones de pescado frito, además de la ensalada de tomate, cebolla y aceitunas, la barquita de butifarra y las anchoas.
🐟 Reseña del bar La Plata
Barra libre en el bar La Plata
Desde que abrió en 1945, el bar La Plata solo ha servido 4 tapas: pescado frito, ensalada de tomate, cebolla y aceitunas, barquita de butifarra y anchoas. Hemos hablado con Roger Pasqual, actual propietario del bar, quien nos ha explicado que "celebraremos el aniversario tal como hicimos para los 70 años, siguiendo la filosofía del abuelo. Él decía que cuanto más daba, más tenía; y eso es lo que haremos para honrarlo, celebrar el aniversario con los clientes, para agradecerles la fidelidad".
"El abuelo y la abuela vivían en el bar; dormían en el altillo que hay en la cocina y abrían durante todo el día. Eran otros tiempos y una época muy difícil de posguerra"

El bar La Plata es uno de los poquísimos lugares de Barcelona que ha tenido los mismos propietarios desde que abrió hace ya 80 años. No ha tenido remodelación, modernización ni lavado de cara, como tantos otros locales históricos de la ciudad. En La Plata mantienen la misma esencia de toda la vida e incluso mantienen personal que empezó a trabajar allí hace más de medio siglo. Es el caso de Pepe Gómez, que empezó como camarero en 1972, con solo 14 años, y hoy en día aún sirve vermuts y tapas en el bar que lo ha visto crecer.
"A mi abuela se le ocurrió ir a la Boquería a comprar pescado para freírlo porque decía que los estibadores y marineros, que en aquella época frecuentaban el bar, necesitaban energía"
Un bar mítico
Los fundadores de La Plata son Pepito y Quimeta, Josep Marjanet y Joaquima Planas, abuelos de Roger Pasqual. Con un puñado de pesetas que recibió el abuelo de préstamo, abrieron un local que, al principio, servía comida y bebida desde las 6 de la mañana hasta las 11 de la noche. "El abuelo y la abuela vivían en el bar; dormían en el altillo que hay en la cocina y abrían durante todo el día. Eran otros tiempos y una época muy difícil de posguerra", explica Pasqual. "A mi abuela se le ocurrió ir a la Boqueria a comprar pescado para freírlo porque decía que los estibadores y marineros, que en aquella época frecuentaban el bar, necesitaban energía. El abuelo no lo veía claro, pero 80 años después ha quedado demostrado que la decisión de la abuela fue un acierto porque si por algo es conocida La Plata, es por las tapas de pescado frito", añade. Actualmente, la madre de Roger Pasqual, Anna Marjanet, es la jefa del bar, donde también trabajan tres cocineras y dos camareros, uno de ellos el mítico Pepe Gómez.