Barcelona ha sido reconocida en el podio como una de las 'no capitales' más atractivas para visitar en Europa. Un ranking creado por el portal de viajes Radical Storage que se ha querido fijar en lo que llama "segundas ciudades", aquellas grandes urbes que no son las capitales de su Estado pero sí la segunda ciudad en tamaño, población e importancia sociopolítica. Para la lista se ha trabajado un estudio que se basa en cinco categorías clave para la experiencia turística: alojamiento, gastronomía, compras y cultura y atracciones locales, así como conectividad. En este listado de las 44 principales "segundas ciudades" de Europa, Barcelona ocupa la segunda posición global con una puntuación de 5,75 sobre 10, solo por detrás de Novi Sad (Serbia), que lidera con un 5,87.
Un ranking que confirma el peso de Barcelona como destinación internacional de primer nivel, capaz de competir en atractivo el resto de grandes ciudades europeas como Londres, Roma, París o Berlín. De hecho, el portal señala que el turismo es "el gran negocio" de la ciudad y se hace eco de la creciente aversión que eso genera en buena parte de la población local, que lamenta las consecuencias que esta gran cantidad de visitantes traen de rebote: la masificación de espacios, el encarecimiento de precios, el impacto sobre el mercado de la vivienda, los problemas de convivencia o la desaparición del comercio y de restaurantes de toda la vida en favor de comercios y establecimientos turísticos.
Así las cosas, el valor cultural es uno de los elementos que más contribuyen a la buena posición de Barcelona en el ranking. El estudio que lo acompaña destaca que la ciudad dispone de 2.858 atracciones valoradas con al menos cuatro estrellas, una cifra que la sitúa al frente en esta categoría. Además, casi la mitad de las atracciones analizadas obtienen esta calificación elevada, con un coste medio de entrada de unos 30 euros. En este apartado también se subraya el patrimonio modernista de la ciudad, destacando obras emblemáticas como la Sagrada Familia o el Park Güell, que forman parte de la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO y que son uno de los principales motores de la atracción internacional.
Gastronomía y comercio
La gastronomía es otro de los puntos fuertes. Barcelona se sitúa en cuarta posición dentro del ranking europeo gracias a la variedad de su oferta culinaria y a las buenas valoraciones que acumulan los restaurantes de la ciudad. La combinación de cocina mediterránea tradicional con propuestas innovadoras ha consolidado Barcelona como un centro gastronómico en crecimiento, con presencia destacada en guías internacionales y con un número creciente de restaurantes reconocidos con estrellas Michelin. En el ámbito comercial, la ciudad también sobresale. Según el informe, Barcelona es la segunda mejor ciudad 'no capital' de Europa para compras. Con un total de 784 establecimientos analizados, las valoraciones medias llegan a 4,2 sobre 5, un resultado que refuerza la imagen de la ciudad como destino de turismo de compras. El eje comercial de Passeig de Gràcia, las tiendas de moda internacional y la combinación con mercados tradicionales contribuyen a esta percepción, según el ranking.
Buenas conexiones y hoteles caros
La accesibilidad es otro de los elementos más destacados. Barcelona encabeza esta categoría gracias a las conexiones aéreas del aeropuerto de El Prat, situado a solo quince kilómetros del centro y con enlaces directos a 218 destinos a través de 82 aerolíneas. La facilidad de acceso a la ciudad, tanto por vía aérea como por tren de alta velocidad y red vial, la convierten en una de las ciudades no capitales mejor comunicadas del continente europeo. En cambio, el alojamiento se presenta como el punto débil. El estudio sitúa Barcelona en el lugar 37 de esta categoría, un resultado que refleja el elevado coste medio de los hoteles en comparación con otras ciudades europeas del mismo ranking. Los precios altos y la presión turística, especialmente en temporada alta, influyen en esta posición más baja y ponen de relieve uno de los grandes retos que afronta la ciudad en la gestión del turismo.