Siempre se ha considerado el arte como un valor refugio, sobre todo en tiempo de crisis o inestabilidad, pero la mayoría de grandes coleccionistas catalanes se han movido por criterios que tienen más que ver con la pasión que con la economía. En este artículo se relaciona, por orden alfabético, una veintena de estos grandes coleccionistas que han sido noticia en la prensa, muchos vinculados a conocidos linajes empresariales, aunque, evidentemente, no son los únicos que han armado destacados fondos artísticos. Y no se incluye a las fundaciones públicas o de grandes compañías privadas, que juegan en otra liga.
• Isak Andic Ermay, fundador de Mango, fallecido en diciembre pasado en una excursión por la montaña de Montserrat a la edad de 71 años, formó a lo largo de su vida una colección de arte contemporáneo. Está en el Hangar, como llaman a un anexo de la sede central de Mango en Palau-Solità (Barcelona) donde Isak Andic tenía su despacho. También hay esculturas en los jardines externos. Y cedía obra a museos. Posee piezas desde Miró a Plensa, pasando por la etapa catalana de Picasso y también de reconocidos artistas de otros países. Esta colección ahora es propiedad de sus tres hijos, los hermanos Jonathan, Judith y Sarah Andic Raig.
• José Daniel Barquero Cabrero (Barcelona, 1966), lobbista y administrador de grandes fortunas, actualmente residente en Madrid, colecciona antigüedades, tallas religiosas de madera policromada, relojes antiguos (ha fundado el Museo Internacional de Alta Relojería de Bolsillo, MIARB, que se mostrará al público dentro de dos años), manuscritos de celebridades (en octubre inaugurará una exposición en Sevilla sobre el poeta chileno Pablo Neruda)... y también de pintura rusa. Hasta 2002 estuvo al frente de la galería de arte Oganes, con sede en Barcelona y Moscú. Es uno de los artífices de la llegada del Museo Carmen Thyssen a Barcelona. Afirma a ON ECONOMIA que "solo compro lo que me gusta". Su primogénito, el joven pintor José Luis Barquero (Barcelona, 1997), clausura este domingo una exposición de su obra en la sala Mayoral de Barcelona.
• El publicista Lluís Bassat Coen (1941) compró su primera obra en 1968: un oleo de Àngel Jové. Ahora reúne a cerca de 3.000 obras. La Fundación Privada Carmen & Lluís Bassat –que también lleva el nombre de su esposa, Carmen Orellana Ribas– firmó un acuerdo con el Ayuntamiento de Mataró para crear el consorcio Museu d’Art Contemporani de Mataró, que exhibe parte de la colección en la Nau Gaudí de esta localidad.

• Tatxo Benet Ferran (Lleida, 1957), CEO de Mediapro, compró en 2018 la obra 'Presos políticos en la España Contemporanea', precisamente antes de ser retirada de la feria Arco de Madrid, a partir de la cual ha armado una colección de arte censurado. Estas piezas se exhibieron en su Museo del Arte Prohibido, que cerró en junio pasado un año y medio después de abrirlo al público. Benet atribuyó el cierre al "escrache" sufrido por parte de trabajadores subcontratados, del sindicato Solidaridad y Unidad de los Trabajadores (SUT), que se manifestaban delante del museo desde que se declararon en huelga indefinidas en febrero pasado. Este museo estaba situado en la Casa Garriga Nogués, que con anterioridad había acogido las colecciones Mapfre y Godia. Ahora, algunas de las obras del fondo de arte censurado de Tatxo Benet son nómadas: viajan de ciudad en ciudad.
• En la familia Carulla, propietaria de Agrolimen, hay varios coleccionistas, pero en esta faceta destaca el matrimonio formado por Aurèlia Carulla Font (de la segunda generación de la familia fundadora de Gallina Blanca) y Carlos Usandizaga Lleonart. En una de sus residencias tienen un fondo muy diverso que va desde el arte africano al precolombino, desde antigüedades hasta la pintura contemporánea, incluidas esculturas y cerámicas, según un artículo publicado en El País en 2023 por Dani Levinas, cronista de grandes coleccionistas que falleció en abril del año pasado.
• La familia Casacuberta Marsans –formada por Fernando Casacuberta Villamil, Rosario 'Coty' Marsans Torres y sus cuatro hijos– abrió el año pasado un museo en el antiguo hospital de clérigos de Sant Sever, en la calle de la Palla, cerca de la Catedral de Barcelona, que solo se puede visitar con cita previa. Exponen 46 obras de su colección de más de 300. Presenta dos grandes pilares: la pintura gótica y la de finales del siglo XIX y principios del XX. Por su discreción, esta familia había pasado casi desapercibida aunque ha cedido obras a grandes museos europeos y ha participado en subastas internacionales de arte. Son propietarios de una destacada cartera de nobles edificios en ciudades como Ginebra, Praga, Bilbao, Madrid y, sobre todo, en Barcelona. Entre los activos situados en el centro de la capital catalana están los inmuebles que acogen el Decathlon, el Hotel Kimpton Vividora (de cinco estrellas, que han puesto en venta), el Hesperia Ramblas (de tres) o el Palacio Castell de Pons (actualmente, vacío) de la plaza Cucurella.

• Carmen Cervera Fernández de la Guerra (Sitges, 1943), más conocida por el título de Baronesa Thyssen, es la principal coleccionista catalana, con mucha diferencia, por la herencia que recibió del difunto barón Heinrich Thyssen-Bornemisza (Scheveningen, Holanda, 1921 – Sant Feliu de Guíxols, 2002). En el Museo Thyssen de Madrid se encuentra parte de la colección del barón, que el Estado compró, y también parte del fondo artístico de la baronesa Carmen Thyssen, que el Estado alquiló. Además, hay dos museos con su nombre –en Málaga y Andorra la Vella– y pronto habrá dos más –en Sant Feliu de Guíxols y Barcelona–. El promotor de este último es la gestora de inversiones Stoneweg, que ha firmado un contrato de alquiler por una de las colecciones de pintura catalana de la baronesa que exhibirá en el edificio de los antiguos Cines Comedia, en el paseo de Gràcia.
• Josep Maria Civit Gomis (Montblanc, 1947) es un publicista que empezó a trabajar en la agencia de Víctor Sagi y que, en 1974, fundó Taula de Disseny, que se ha encargado de la identidad visual de grupos como La Caixa o Telefónica. Colecciona desde que tenía 16 años. Su fondo comprende piezas desde los años setenta hasta la actualidad, desde Jaume Plensa a Damien Hirst o Jeff Koons. Expone desde el 2008. La obra está depositada en centros de Palamós, Terrassa y Mallorca.
• Jordi Clos Llombart (Barcelona, 1974) está al frente de la Fundación Arqueológica Clos, titular del Museo Egipcio de Barcelona, y del fondo de arte de la cadena Derby Hotels. Cada uno de sus hoteles es un pequeño museo, con piezas en espacios comunes e, incluso, en las suites. Así, el Hotel Claris cuenta con una destacada colección de arte precolombino; el Hotel Bagués, con una muestra de jarrones modernistas de cristal del maestro francés Émile Gallé (1846-1904); el aparthotel Arai, con mosaicos romanos; Suites Avenue, con piezas de arte hinduista y budista de los siglos XVI al XIX; Granados, arte jemer de los siglos XII al XIV y piezas de la India; Balmes, arte africano; Astoria, pinturas y dibujos del catalán Ricard Opisso (1880 – 1966); Urban (de Madrid), piezas tribales de Papúa Nueva Guinea; Villa Real (de Madrid), mosaicos romanos de los siglos II al VI d.C.; The Caesar (Londres), más mosaicos romanos. Incluso, Josep Guinovart creó dos grandes trípticos y un collage expresamente para Derby. Además, Jordi Clos también posee litografías, acuarelas o grabados de maestros como Picasso, Cuixart, Brossa, Tàpies, Miró o Wilfredo Lam.

• Lluís Coromina Isern está al frente del grupo familiar Agrienergia, con sede en Banyoles, dedicado a la energía –primero a la hidroeléctrica con los saltos de agua del río Fluvià, pero después también al gas y a la fotovoltaica– y que es propietaria de la histórica Harinera Coromina, que funciona desde hace 128 años. Es un referente en la producción de harinas de calidad para la panificación, utilizadas en panaderías artesanas. También controlan Teisa, compañía de autobuses que opera en las comarcas de Girona, y Aguas de Banyoles. Ahora, Lluís Coromina Unzueta, de la quinta generación, es el primer ejecutivo. A través de la Fundación Lluís Coromina, cuidan de las personas, la naturaleza y el arte. Poseen una colección de un millar de obras, centrada en arte contemporáneo y escultura antigua. Disponen de cinco espacios de exhibición.
• Liliana Godia Guardiola (Barcelona, 1971) preside la Fundación Francisco Godia, que ella misma impulsó y que reúne un importante fondo de arte heredado de su padre (el acaudalado hombre de negocios Francisco Godia Sales, 1921-1990) que va desde la edad media a la contemporánea. Durante 16 años, hasta 2015, exhibió las piezas más destacadas de esta colección en los salones de la Casa Garriga Nogués, de la calle de la Diputación, hasta que decidió cerrarla.
• Francisco Daurella Franco, de 98 años, es el tío de Sol Daurella Comadran, presidenta de Coca-Coca Europacific Partners, la mayor embotelladora de esta bebida en el mundo. Con el alias Fran Daurel, como se llama su colección, ha formado un importante fondo de arte, una parte del cual expone en un espacio del Pueblo Español de Montjuic, que es un recinto turístico presidido por su yerno, Jorge Campins Figueras. Francisco Daurella también expone en un museo de Aravaca (Madrid) y en el Empordà. Ha tenido problemas con Hacienda, que lo sancionó por alegar que residía en Mónaco cuando, según los inspectores, pasaba más de la mitad del año en Catalunya.
• El matrimonio formado por el arquitecto Josep Inglada Mañé (1956) y la interiorista Roser Figueras Fàbregas (1958) empezaron a coleccionar arte contemporáneo en la década de los ochenta. En 2006 impulsaron Cal Cego, como se llama la masía de la Bisbal del Penedès donde depositaron la colección. Han cedido obra a museos como el Macba. Desde antes de la pandemia no hay más referencias de este fondo.
• Andreu Rodríguez Valbeny (Reus, 1955) es un empresario de la informática que, en compañía de su esposa, la artista Marie-France Veyrat, ha impulsado la New Art Foundation y un museo que también tiene la sede en Reus (Tarragona). Reúne una colección de arte tecnológico que está considerada de las más importante del mundo. Fue el fundador de la cadena de tiendas de informática BEEP, de la que surgió la colección BEEP, como se llamó en sus orígenes. Antes de la pandemia vendió una participación mayoritaria de su grupo empresarial a un fondo de inversión, pero, desde entonces, todavía ha apostado más por el arte.
• Los hermanos Montserrat y Artur Saltor Rossell exponen su colección privada dentro de la fábrica familiar de estampación textil Multipunto, en Sant Adrià del Besòs (Bacelona). Está especializada en cerámica catalana y española del siglo XV al XVIII, pero también incluye pinturas –de Tièpolo a Barceló–, obra sobre papel, orfebrería y escultura gótica. También contiene un apartado de grafitis.
• El empresario y mecenas Joan-Artur Roura Comas (Barcelona, 1944) ha formado una gran colección, sobre todo de pintura catalana de varias épocas, que cede a museos. Sin sucesores, ha expresado la voluntad de donar su valioso fondo a museos catalanes. En realidad, ya los está ayudando. Hace dos años, compró en una subasta en París un retablo del maestro Francesc Solives, del siglo XV, para entregarlo al Museo de Lleida y compensarlo, así, de la pérdida de las obras de Sigena.
• El constructor leridano Julio Sorigué Zamorano, fallecido en agosto pasado a los 92 años, y Josefina Blasco Clemente, su esposa, crearon un grupo empresarial y también una fundación para dedicarse a la atención a las personas y, posteriormente, al arte. Sin hijos que les sucedan, en 2012 cedieron la presidencia del grupo empresarial y de la fundación a Ana Vallés Blasco, su sobrina. La Fundación Sorigué posee una de las mejores colecciones de arte contemporáneo del Estado, iniciada con pinturas de Ramon Casas, Isidre Nonell, Marià Fortuny y otros artistas catalanes de los siglos XIX y XX y, después, ampliada con autores de primer nivel mundial de todas las disciplinas artísticas. Exponen parte del fondo artístico en una explotación industrial de áridos cerca de Balaguer (Lleida).

• El empresario y mecenas Josep Ildefons Suñol Soler, fallecido en el 2019 a la edad de 92 años, dejó una fundación que es propietaria de una colección de 1.200 piezas, que van desde Miró o Picasso a Andy Warhol. Cede obra a grandes museos de todo el mundo como el MOMA de Nueva York o la Tate Modern de Londres. Era hijo de Josep Suñol Garriga, dirigente republicano y presidente del Barça que fue fusilado por las tropas franquistas en la sierra madrileña de Guadarrama en los inicios de la Guerra Civil.
• Rafael Tous Giner (Barcelona, 1940) donó en 2020 más de un millar de obras de arte conceptual al Macba. El alcalde Jaume Collboni le concedió a finales de 2023 la medalla de oro al mérito cultural por este gesto. Miembro de una estirpe de empresarios del textil, armó un importante fondo de arte, muy diverso. Se casó en primeras nupcias con la multimillonaria Carmen Godia Bull (1944), otra coleccionista, con la que tuvo tres hijos –Rafael, Carla y Cristina Tous Godia– que hoy lideran el imperio materno.

• Família Uriach. El industrial farmacéutico Joan Uriach Marsal, que falleció en diciembre pasado a la edad de 95 años, explicó en una entrevista a El Punt Avui que su bisabuelo ya era un apasionado por el arte, de manera que esta familia lleva dos siglos coleccionado obras. Su padre, Joan Uriach Tey, la repartió entre sus tres hijos. Destacan las obras de grandes pintores catalanes de finales del siglo XIX y de la primera mitad del XX, pero también cuenta con piezas de artistas de otros países. Esta colección no se expone al público.
• El mecenas y empresario farmacéutico Antoni Vila Casas, fallecido en septiembre de 2023 a la edad de 92 años, dejó una fundación que es la titular de una colección de más de 3.000 pinturas, esculturas y otras obras artísticas que se exhiben en cuatro espacios museísticos. Solo cuatro meses después de su muerte, el presidente y tres destacadísimos miembros del patronato de la Fundación Vila Casas –Antoni Sagnier, Artur Mas (expresident de la Generalitat), Daniel Giralt-Miracle (crítico de arte) y Joan Font Torrent (advocat)– dimitieron por discrepancias con la nueva línea que la familia –la viuda, Montserrat Pascual, y la hijastra, Montserrat Viladomiu Pascual– quiere dar a la entidad. Antes de este verano, también se fue el director general y responsable de finanzas, Joan Torras.
Hay muchos más nombres en el selecto club de los coleccionistas privados: Antoni Gelonch, Sisita Soldevila, la familia Alorda Derksen, el difunto abogado Ventura Garcés... Catalunya es un país de coleccionistas de arte.