Hace bastante frío, aunque todavía es pronto para que nieve en Vielha. Las pistas acaban de abrir y los primeros esquiadores ya suben para empezar la temporada. Pero para quienes no nos gusta esquiar, ir a Vielha es sinónimo de comer bien. La olla aranesa es el plato estrella del valle, pero más allá de la cocina tradicional, Vielha, a pesar de ser pequeño, tiene muchos restaurantes donde se come de lujo. Una de las mejores opciones para disfrutar de una comida informal en el centro es el restaurante Tinku.
Unas tapas espectaculares
César Mory es el chef del restaurante Es Arraïtzes, en Garòs, pero también es el cocinero de Tinku, su proyecto más informal y desconocido donde prepara unas tapas espectaculares. Cuando hablamos de tapas nos referimos, en realidad, a raciones para comer de uno o dos bocados que se sirven en el centro de la mesa. Y que nadie se imagine solo una tortilla de patatas y unas croquetas. Tinku eleva el concepto de cena informal al siguiente nivel. En un local pequeño, blanco, luminoso y con dos pisos, Mory y su equipo ofrecen una cocina de calidad con raíces nikkei y peruanas, país de origen del cocinero.
Cuando llegamos, hay hambre. Y para empezar a saciarla, probamos diferentes nigiris. El de atún es exquisito, pero la creación más sorprendente es el nigiri de chimichurri, una combinación original y deliciosa. También es buenísima la tempura de alcachofas, acompañada de una salsa nikkei muy adictiva. Huyendo un poco de la cocina nikkei, encontramos opciones como las croquetas de cecina de León, una elaboración bien hecha con un producto infalible. El pulpo braseado o la costilla a baja temperatura, ambos platos melosos y suculentos, son también dos buenas opciones de producto autóctono.
La simpatía de los camareros y la animada música que acompaña la comida ayudan a destensar el momento para convertir Tinku en la mejor opción de Vielha para cenar de forma informal
Originalidad por bandera
La recta final de la cena la encaramos con un uramaki de cangrejo, una gyoza de langostino y un bizcocho de postre. Unos platos que no solo son buenos, sino que también son divertidos de comer y de compartir. La combinación de productos exóticos y autóctonos está muy bien conseguida. Mory es un gran experto en coger lo mejor de cada uno de los dos mundos para elevar unos platos aparentemente sencillos, pero difíciles de perfeccionar.
Los colores, los olores y los sabores son la base del ambiente de Tinku, pero no son la única pieza importante. La simpatía de los camareros y la animada música que acompaña la comida ayudan a destensar el momento para convertir Tinku en la mejor opción de Vielha para cenar de forma informal.