Pocas horas después de entrar en Soto del Real, Koldo García ha abandonado durante unas horas la prisión, citado por el juez de la Audiencia Nacional que investiga la trama centrada en la compra de mascarillas por parte del ejecutivo de Canarias durante la pandemia, con el ahora ministro Ángel Víctor Torres entonces al frente del gobierno autonómico. Con todo, se ha acogido a su derecho de no declarar. Este jueves, el juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente ordenó la entrada en prisión sin fianza de José Luis Ábalos y de su exasesor Koldo García por el caso Mascarillas, ante el riesgo de fuga por las elevadas penas que se les piden. Koldo ha seguido la misma estrategia que ha marcado sus últimas comparecencias ante el Tribunal Supremo. El exasesor del ministro ha llegado sobre las 8:45 a la Audiencia Nacional, a bordo de una furgoneta de la Guardia Civil que lo ha trasladado desde la prisión de Soto del Real.
Coincidiendo con su entrada en prisión, el comisionista Víctor de Aldama declaró ante la Audiencia Nacional por el mismo caso de la compra de mascarillas por parte del gobierno de Canarias. En su caso, Aldama aseguró tanto ante el juez como ante los medios de comunicación que el ministro Torres debería estar "preocupado". También aseguró que en el primer encuentro con el entonces presidente canario estaban presentes Koldo y Ábalos, y reconoció que había hecho pagos de 10.000 euros al asesor ministerial porque estos abrían muchas puertas.
El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno decidió citar a declarar como investigados tanto a Koldo como a Aldama en esta causa a principios de noviembre, después de que se publicara el informe de la UCO sobre las mascarillas de Canarias, donde se hacía evidente el vínculo entre Torres y el asesor de Ábalos, a quien enviaba notas de voz por WhatsApp y con un lenguaje muy cercano. Este juez investiga desde hace dos años irregularidades en la adjudicación de contratos de emergencia durante la pandemia por parte de diferentes administraciones públicas.
Riesgo de fuga
El juez del Supremo razonó este viernes que, además de haber indicios más que suficientes de la eventual comisión de graves hechos delictivos, el posible riesgo de que estos acusados pudieran sustraerse a la acción de la justicia resulta, en este momento, "extremo", por lo que entiende que no puede conjurarse con el simple mantenimiento de las medidas cautelares que tenían hasta ahora tanto Ábalos como Koldo. Hay que tener en cuenta que el fiscal jefe de Anticorrupción, Alejandro Luzón, pide 19 años y medio de prisión para Koldo, mientras que las acusaciones populares lo elevan hasta los 30.
