De Santa Eulàlia de Riuprimer al mundo entero. Del asfalto y la bicicleta a las revistas y diarios internacionales más prestigiosos. Y todo a base de actitud, perseverancia, tenacidad y exigencia consigo mismo. Pero, claro está, también mucho talento. Estos adjetivos son los que pronuncian los amigos y el entorno más próximo de Lluc Crusellas, el pastelero catalán que ganó el World Chocolate Master (WCM) en el 2022. Ahora, casi tres años después, se ha estrenado en exclusiva en los cines Aribau el documental Lluc, una crónica de la pastelería, dirigido por Jordi Torra.
El documental que revive la consecución mundial en el WCM de Lluc Crusellas
“La pastelería es aquel momento que viene después de que una necesidad se haya cubierto: alimentarse. Todo lo que viene después para mí es un regalo”, describe Jordi Roca. Es una de las muchísimas caras famosas que aparecen en el transcurso de este largometraje, una odisea sobre el pastelero de Osona y cómo se preparó durante 365 días para coronarse en el concurso de chocolate más prestigioso del mundo. En este oficio “muy sacrificado”, según explicado el estrellado Albert Adrià, es muy difícil triunfar. Y más todavía cuando se trata de un certamen en el que participan los mejores pasteleros de cada país. Uno solo seleccionado por cada región, para un total de 18 participantes —es decir, 18 países— en una final que se celebró en París.

El documental refleja con pasión y dedicación los meses antes del concurso del WCM. Son casi 100 minutos para entender la importancia y el significado de este acontecimiento mundial. “Para ganarlo tienes que saber a dónde te estás presentando”, replican los pasteleros franceses más aclamados por todo el mundo. La dirección de Torra muestra a un inexperto pastelero de veintiséis años que se enfrenta al reto mayor de su carrera: entrar en el Olimpo de los grandes pasteleros ganando el World Chocolate Masters.
Una radiografía de la preparación física y psicológica; las capacidades artísticas y creativas y la finura gastronómica serán analizadas por los mejores pasteleros mundiales, que no dejarán fácilmente que un joven mortal acceda a su reino. “La única persona que me da miedo es yo mismo. Que yo falle. Que colapse. Solo me doy miedo de mí mismo”, reconoce el protagonista días antes de la final. La emoción y la vivencia casi en primera persona son la puesta en escena de esta dulce crónica. Para conseguir alzarse con la victoria, la pieza audiovisual desgrana las seis figuras de chocolate que presenta al concurso y que maravillan al jurado. Cómo las diseña, cómo las ejecuta, como comete errores, momentos de cansancio hasta llegar a la final en octubre de 2022.
Las 6 creaciones de chocolate de Lluc Crusellas
“Cuando pruebas un bombón de chocolate, te lo da una persona que te ama. Desde que somos pequeños, asociamos el chocolate con la felicidad”, asevera el pastelero de los hermanos Roca. Con esta vocación de impresionar, de enamorar y de transmitir afecto a través del cacao, crea la primera de las seis maravillas. Una cosa sencillamente magnífica. Bajo este concepto crea la figura del elefante de chocolate, con todo lo que comporta en el ámbito de diseño, técnica, investigación.

Una impresión en 3D es la siguiente prueba, algo para compartir. “Que sea instagrameable”, dicen las bases del concurso. Y es que si una cosa queda clara es que el World Chocolate Masters es show, son cámaras en cada esquina y una búsqueda de comer a través de los ojos. Diseñar unos postres de restaurante o desarrollar 3 recetas diferentes para una tienda monoproducto son algunos de los retos a los que se enfrenta Crusellas. “El WCM consiste en salirse de las reglas de juego; hacer cosas que no harías en el día a día. Que no harías nunca. Arriesgarse hasta el límite”, describen a los franceses más relevantes del sector. Bajo esta premisa remata un bombón molido para impresionar al jurado, sobre todo con respecto a sabor, texturas e ideas. Y, en último lugar, la creación de una escultura de chocolate.
Se trata, pues, de un documental que va más allá de la chocolatería. Es un viaje emocionante hacia el triunfo, lleno de pasión, sacrificio y perseverancia. Con un enfoque a la calidad artística y la narrativa atractiva, se pretende inspirar y emocionar audiencias de todas partes del mundo y con amplio rango de edad. Con la colaboración de Fishcorb Films SL y un equipo comprometido, pretendemos narrar una oda a la excelencia culinaria y a la preparación meticulosa que requiere el dominio de esta forma de arte gastronómico.