La situación de los incendios en el noroeste peninsular, concretamente en Galicia, Castilla y León, Asturias y Extremadura se mantiene crítica y sigue siendo preocupante, aunque las previsiones meteorológicas apuntan a una mejora de la situación que ya ha rebajado el riesgo por incendios forestales en áreas del norte y el este peninsular, pero que sigue siendo muy alto o extremo en el resto del estado. Los incendios de las últimas semanas, agravados por la ola de calor que ha asolado el estado durante dos semanas, ha hecho que desde inicios de este año ya se hayan quemado 382.607 hectáreas, según los últimos datos actualizados del Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (EFFIS, por sus siglas en ángulos), del sistema de información satelital Copernicus. Estos datos llegan en un contexto en el cual miles de efectivos de los dispositivos de extinción siguen luchando contra los 40 incendios activos, 21 de los cuales de situación de riesgo 2 sobre 3 por su gravedad, y que siguen arrasando todo lo que se encuentran a su paso y han dejado miles de evacuados en diferentes provincias. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este martes que su gobierno declarará zona catastrófica las áreas más afectadas por los fuegos en una visita al centro de mando avanzado del incendio de Jarilla, en Cáceres. Posteriormente, Sánchez se ha desplazado a Molezuelas de la Carballeda, en Zamora, de donde se ha marchado a primera hora de la tarde entre los abucheos de algunos vecinos.

Hasta el momento, la Guardia Civil y la Policía han desalojado a 31.130 personas, y también han detenido a una treintena de personas e investigado en otras 92 por su presunta participación en el origen de los fuegos, que han causado la muerte de cuatro personas estos días y han dejado a una decena de heridos de diversa consideración. La última de estas muertes es la de un bombero originario de Soria que murió este domingo al volcar la autobomba que conducía en la localidad leonesa de Espinoso de Compludo, afectada por el incendio de Yeres y Llamas de Cabrera que calcinó el paraje natural de Las Médulas la semana pasada. De hecho, está en Castilla y León donde se concentran la mayoría de incendios activos, 29, que afectan principalmente a las provincias de León y Zamora. Preocupan especialmente los fuegos activos que afectan al Parque Nacional de Picos de Europa y al lago de Sanabria, así como la entrada de un frente del incendio de Jarilla, en Cáceres, a la provincia de Salamanca.

Mejora la situación en Galicia y Asturias

Galicia ha reducido el número de grandes incendios activos de nuevo a siete, muy localizados en la provincia de Ourense, donde preocupa sobre todo el fuego de Larouco, que después de superar al de Chandrexa ha llegado ya a las 20.000 hectáreas calcinadas y es el mayor de la historia gallega desde que existen registros. En total, se han calcinado cerca de 70.000 hectáreas en Galicia, pero la situación está "un poquito mejor", según el presidente gallego, el popular Alfonso Rueda, ya que durante la noche se han estabilizado dos fuegos, el de Maceda y el de Vilardevós-Fumaces y a Trepa. Las fuerzas de seguridad han detenido a un menor de 17 años, al cual se le han intervenido dos mecheros, como presunto autor de siete incendios forestales producidos durante la primera quincena de agosto. El incendio que se originó en Porto de Sanabria, en Zamora, ha traspasado la frontera con Ourense calcinando, al menos, 20 hectáreas de la parte gallega de Pena Trevinca, un espacio natural que alberga el bosque más antiguo de la región.

La climatología también ha permitido que siga mejorando el control de los 17 incendios que se contabilizan en Asturias, ocho de ellos todavía activos, por lo cual se prescindirá del apoyo de la UME a fin de que esta pueda colaborar en la extinción del incendio forestal de Anllares del Sil, en la provincia de León. En el Principado, hay fuegos procedentes de los incendios de León en Cangas del Narcea, Somiedo y Degaña, mientras que en el otro extremo de la comunidad, en la zona de los Picos de Europa, también se ha visto afectado el concello de Ponga, por el incendio de La Uña. La Agencia Estatal de Meteorología ha dicho este martes, en el transcurso de la reunión del Comité Estatal de Coordinación (Cecod), que la bajada de las temperaturas y la moderación de los vientos en las provincias de Ourense, León y Zamora durante la noche hacen más previsible y lento el avance de los incendios.

Castilla y León y Extremadura siguen en alerta

De los 29 fuegos forestales activos en Castilla y León, lo que más preocupa en estos momentos es lo declarado en la localidad de Porto de Sanabria, que ya es de nivel 2 y que afecta de lleno el Parque Natural del Lago de Sanabria, Sierras de la Segundera y de Porto, con seis localidades desalojadas y otras confinadas y en preaviso de desalojo, y que suman 8.000 personas afectadas entre vecinos y veraneantes. Por otra parte, el incendio que todavía quema en Extremadura y que se originó en la localidad de Jarilla, en Cáceres, ha atravesado la frontera con la comunidad castellanoleonesa y ya quema algunas hectáreas de terreno en el término municipal de Candelario, en Salamanca. La evolución de algunos incendios que afectan al oeste de la comunidad podría mejorar durante la jornada de hoy, y según ha apuntado el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, podría haber buenas noticias sobre el realojamiento de las personas que se encuentran fuera de casa suyas.

La complicada situación en la zona y la mejora de las condiciones en Catalunya han permitido la salida este martes de un convoy con 56 efectivos y 21 vehículos de varias Agrupacions de Defensa Forestal (ADF) de Catalunya, el Grup Especial de Prevenció d'Incendis Forestals (GEPIF) y los Agents Rurals desde Torrefarrera, en el Segrià, en dirección a Castilla y León donde estarán desplazados hasta, como mínimo, este sábado en respuesta a una petición del Centro de Seguimiento y Coordinación de Emergencias en el ámbito estatal (CENEM). El jefe de la expedición, Eladi Flix, ha destacado que la petición del CENEM recibimiento a través de Protección Civil se ha atendido con el fin de poner "todos los medios al alcance para poder ir a ayudar donde haga falta". Eladi Flix ha insistido en que la ayuda se ha ofrecido después de que el riesgo de incendios haya disminuido en Catalunya y que se haya levantado el cierre de nueve espacios naturales del país. "Las ADF no dejan descubierta sus zonas porque tienen medios para cubrirlas; el GEPIF sigue trabajando con cinco miembros y los Agentes Rurales continuaremos con todos los efectivos", ha señalado.

Este martes también puede ser clave en Extremadura para el control del incendio originado en Jarilla el lunes pasado y que ya ha quemado 15.500 hectáreas en la provincia de Cáceres, ya que la mejora de las condiciones meteorológicas, con la aparición de vientos de componente noroeste, permitirá avanzar a los medios aéreos. El peligro mayor en este incendio es por su posible afectación al valle del Jerte en un posible descolgamiento del incendio hacia las localidades de Jerte y Tornavacas. El fuego ha traspasado la Garganta de Los Papúos, pero según el consejero de Presidencia, Interior y Diálogo Social, Abel Bautista, solo ha quemado a la parte superior del valle y "ha preservado esta joya patrimonial".

Los incendios también arrasan Portugal

En Portugal, los datos del EFFIS apuntan que los incendios habrían calcinado 234.926 hectáreas de terreno, lo cual supone un 2,56% de la superficie total del país. Este dato coloca Portugal como el país europeo en el cual se ha quemado una proporción mayor de terreno este año. Los datos del sistema europeo Copernicus ponen de relieve que la península Ibérica es el territorio más afectado por los incendios forestales este año, con casi 600.000 hectáreas quemadas entre España y Portugal. Los incendios en Portugal han causado la muerte de un bombero el pasado domingo mientras combatía las llamas en la localidad de Covilhã, afectada por el incendio que más medios tiene movilizados en estos momentos en el estado portugués. Los registros de este año ya suponen que este año 2025 será el segundo con más superficie quemada en Portugal, solo superado por el fatal verano de 2027, que dejó más de medio millón de hectáreas calcinadas en el país lusitano.