Junts per Catalunya y el PSOE se reunirán entre este jueves y viernes de nuevo en Suiza a las puertas de la votación sobre la delegación de las competencias de inmigración. Así lo ha podido saber El Nacional.cat, tres semanas después de que se reunieran por última vez. Un encuentro, por cierto, que desembocó con la reunión entre el president en el exilio, Carles Puigdemont, y el president de la Generalitat, Salvador Illa, el pasado martes 2 de septiembre. El encuentro mensual entre socialistas y junteros contará con la participación, como siempre, del mismo Puigdemont y el secretario general de Junts, Jordi Turull, mientras que en la parte socialista habrá el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, después de la caída del exnúmero tres del PSOE Santos Cerdán, acusado de corrupción.

El nuevo encuentro, que, como es habitual, cuenta con un verificador internacional, se enmarca a las puertas de la votación sobre la delegación de las competencias de inmigración, que será el próximo martes 23 de septiembre. A pesar de ser la primera votación del acuerdo entre junteros y socialistas, Podemos ya ha advertido que votarán en contra porque consideran que es una ley "racista". Fuentes juntaires apuntan que a estas alturas no hay contactos con la formación de Ione Belarra e Irene Montero porque "no quieren hablar". Por eso, el secretario general juntaire, Jordi Turull, cargó contra Podemos este martes desde Vilanova i la Geltrú: "Podemos prefiere que gestione la inmigración el PP y la Guardia Civil que Catalunya y los Mossos d'Esquadra", remachó.

Los "incumplimientos" de los socialistas

Los juntaires, a todo eso, consideran que si no sale adelante será un nuevo "incumplimiento" de los socialistas, a los cuales se tiene que sumar el hecho de que no se haya conseguido la unanimidad de los 27 estados a fin de que el catalán sea oficial en la Unión Europea o el boicot de los jueces españoles a la oficialidad de la ley de amnistía. Al mismo tiempo, otra de las cuestiones que inquietan los juntaires es que la reforma para el endurecimiento de la multirreincidencia siga en un cajón en el Congreso de los Diputados.

Junts eleva el tono y vincula al PSC a la estabilidad de Sánchez

Por todo ello, los juntaires ya hace semanas que lanzan ultimátums. Empezando por la portavoz de Junts, Míriam Nogueras, quien, durante el debate sobre la presunta corrupción al PSOE en el Congreso, advirtió a Sánchez que "estaba en prórroga". De hecho, el mismo Puigdemont ha ido elevando el tono. Este agosto el president en el exilio aseguró que en otoño "quizás pasarán cosas que no habían pasado hasta ahora". "Nosotros ya hemos dado bastante tiempo", aseguró desde Prada. Un mensaje, por cierto, que también ha dado a la portavoz al Parlament, Mònica Sales, esta semana, vinculando el debate de política general en el Parlament a la estabilidad de Pedro Sánchez. La también vicepresidenta juntaire ha fijado los plenos del 7 y 9 de octubre como fechas en las cuales "empezarán a pasar cosas" si los socialistas no acaban con el "doble discurso" en Catalunya, Suiza y Madrid. Y es que desde el partido de Carles Puigdemont consideran que lo que se habla en Suiza es bien diferente de lo que acaba votando el PSC en Catalunya.

Precisamente, Puigdemont trasladó estos malestares al president de la Generalitat, Salvador Illa, tal como, al día siguiente, explicó a la cúpula del partido. La aprobación de los presupuestos, a estas alturas, están muy lejos por los incumplimientos que señalan los juntaires, motivos por el cual durante el otoño tendrán que tomar "decisiones".

Sánchez insiste en que el PSOE "cumple"

Por su parte, los socialistas mantienen el discurso y aseguran que su gobierno es "estable" e insisten en que cumplen con Junts per Catalunya, poniendo de ejemplo el impulso del catalán al Estado y a la Unión Europea y a "la espera" de la aplicación de la amnistía. "Tenemos la máxima voluntad de cumplir los acuerdos de Bruselas", decía Pedro Sánchez este miércoles a Míriam Nogueras en el Congreso de los Diputados, desde dónde aseguraba que tenían "trabajo por hacer", pero que lo estaban haciendo. Sin embargo, Nogueras acusaba Sánchez de incumplimiento de los acuerdos y de bloquearlos. "Sin rebajas fiscales, sin acceso a la vivienda, sin solucionar los problemas de Rodalies, sin atención ni recursos para nuestros familiares con necesidades", decía la también vicepresidente juntaire.