Maniobras de distracción. La consellera de Acció Exterior i Govern Obert, Victòria Alsina, ha acusado al presidente español, Pedro Sánchez, de reactivar el diálogo con la Generalitat para distraer de la presión internacional. Así lo ha dicho en una entrevista en la ACN publicada este sábado, donde también ha recriminado a Sánchez que utilice la mesa de diálogo como "marketing político" ante estas "presiones internacionales". Más concretamente, ha considerado que el encuentro entre el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, con su homóloga catalana, Laura Vilagrà, "no es coincidencia": es una "operación de distracción" por la "presión" recibida desde el Consejo de Europa, con el seguimiento de las recomendaciones por el caso del 1-O.

Alsina ha recordado que hace un año el presidente español anunció los indultos coincidiendo con el toque de alerta de la Asamblea del Consejo de Europa por la causa de procés. De la misma manera, la consellera cree que el presidente español ha recurrido ahora a las reuniones bilaterales la misma semana que el Consejo de Europa hace un seguimiento de las recomendaciones hechas a España. El socialista letón Boriss Cilevics ha criticado que se mantengan las órdenes de detención contra varios políticos catalanes exiliados y que se estén "cuestionando" los indultos a los líderes independentistas. En esta línea, se ha mostrado tranquila con la celebración en Madrid de la cumbre de la OTAN porque cree que la comunidad internacional ya conoce los problemas del asunto catalán: "No veo con preocupación que eso lo tape".

Nervios en el ministerio de Albares

Lo que sí que ha visto con "preocupación y frustración" es que "se antepongan intereses electorales a la posibilidad de tener una candidatura olímpica catalana" en el 2030. Alsina ha culpado a Sánchez del fracaso de la candidatura de los Juegos Olímpicos de invierno por "tacticismos electorales". "Tiene miedo de unos malos resultados al Aragón después de la derrota en Andalucía", concluye

Por otra parte, la consellera ha asegurado que su departamento mantiene una relación "burocrática" con el ministerio de Exteriores que dirige José Manuel Albares. Tal como decidió el Gobierno, no mantendrá "conversaciones políticas" hasta que se aclare el CatalanGate. Sin embargo, ha puntualizado que eso será así sin que afecte a la "gestión del día a día". Entonces, ha reivindicado el "crecimiento sustantivo" este año de las delegaciones del Govern tanto en África como en Asia. Además, ha adelantado que en el 2023 "el crecimiento se producirá en la cuenca Mediterránea y también en el Asia". Ha destacado que el ejecutivo catalán es recibido "a nivel nacional y regional" y que se han reanudado los contactos de alto nivel a las instituciones de la Unión Europea. "En ningún caso me he encontrado una puerta cerrada", ha subrayado, añadiendo que en el ministerio de Albares se ponen "nerviosos" cuando el departamento de Acción Exterior hace "el trabajo bien hecho".

Ucrania, Junts y el Govern

Respecto de la actualidad internacional, Alsina ve "acertado y adecuado" conceder en Ucrania el estatus de país candidato a entrar en la UE. "Los valores por los cuales está luchando son europeos. La UE tiene que dar un paso adelante y tener este liderazgo", ha dicho, preguntada por si cumple con los estándares europeos de derechos fundamentales. En este sentido, ha advertido que es "un proceso muy largo": "Es muy importante abrir la puerta y a partir de aquí ya se estudiará cómo se puede materializar en los próximos años".

Finalmente, la consellera ha explicado que la relación de su departamento con el resto de conselleries es de "normalidad". "Trabajamos juntos para mover las agendas internacionales", ha añadido. Así pues, coordina con el portavoz de Junts, Josep Rius, la auditoría interna del partido sobre el acuerdo de Govern con ERC. El documento "se socializará" con la ejecutiva "en las próximas semanas", ha avanzado sin revelar cuál es el balance hoy por hoy.