Diálogo. El secretario general de Junts, Jordi Turull, ha defendido hablar con ERC antes de decidir si su formación tiene que salir del Govern, después de que acabe la auditoría sobre el primer año del ejecutivo catalán y que el partido defina tanto la ponencia como la estrategia política en el congreso de julio. En una entrevista con Europa Press publicada este viernes, Turull ha reconocido que del acuerdo de gobierno hay cuestiones se cumplen y otras que no. Antes de actuar, pide ponerlo todo en una balanza: "Quiero tener todos los datos, no por percepciones sino por acciones y hechos, y a partir de aquí tomar una decisión. Si puedes reconducirlo, mejorarlo y cambiarlo es una opción. No tiene que ser una tarjeta roja directa".

La idea es clara: cree que se tiene que "poder hablar" con ERC y replantear todo lo que consideren que no se está cumpliendo o no funciona si el objetivo es culminar el procés de independencia. Turull ha recordado que cuando Junts firmó el acuerdo de investidura había un contexto determinado que ha evolucionado durante el último año, con "una represión que no ha parado" y con cada vez más "porquería" para eliminar a los actores del independentismo. Es decir, ha aprovechado para cargar contra la mesa de diálogo. "El diálogo es una actitud, no puede ser un freno de mano porque, mientras los unos vayan haciendo lo que quieren y como quieran, los otros digan que están pendientes de la mesa de diálogo. Eso no puede funcionar", ha reprochado. En este punto, ha añadido que Junts no renunciará a la independencia y que no bloqueará "las ambiciones de Catalunya al servicio de los pactos". También ha advertido que las dinámicas de los gobiernos de coalición no son sencillas.

El caso Borràs

Turull ha sido preguntado sobre si difiere de la presidenta del partido, Laura Borràs, respecto de la cuestión de salir o no salir del Govern. Una pregunta que no le ha gustado, de manera que ha criticado que se intenten buscar enfrentamientos. ¿Y sobre los que lo consideran pragmático? "Pragmático lo soy. Tuve que hacer un anuncio de las vías del tren y lo hice. Tuve que procurar que estuviera toda la infraestructura para que todo funcionara el 1-O y lo hice. Se hizo el 1-O y se tenía que decidir si se hacía una DUI y apreté para que se hiciera".

Sobre Borràs, el secretario general de Junts espera que el presunto caso de corrupción que lo afecta no afecte "en nada" y ha defendido su presunción de inocencia. De hecho, cree que el independentismo no puede dispararse en el pie o estar distraído y caer en la trampa que se les quiere tender" desde el Estado tanto en este como en otros casos que afecten independentistas. "Estamos en una situación de conflicto, y eso significa saber que las cosas no son por azar cósmico, y que muchas cosas aparecerán porque se las inventarán o distorsionarán", ha apuntado.

Parlament y pactos

En esta línea, cree que el reglamento del Parlament que permite suspender a las personas que sean juzgadas por presunta corrupción "choca" con la presunción de inocencia. El independentismo, que quiere un Estado totalmente diferente del estado español, también tiene que significarse a la hora de decir: somos unos ortodoxos de la defensa de la presunción de inocencia, que todo el mundo tiene derecho a tener", ha subrayado. Es por eso que no contempla que ERC y la CUP den apoyo a la suspensión de Borràs si se le abre juicio oral. "Sobre la hipótesis de sí la dejarán caer, no quiero dedicar ni un minuto a pensar el cual pasaría porque no me cabría en la cabeza de que eso pasara", ha sostenido.

Finalmente, las elecciones municipales. Queda un año para los comicios locales y Turull ya ha explicado que Junts priorizará pactos con las fuerzas independentistas. "A partir de aquí no solo depende de ti porque cuando puedes tener un gobierno netamente independentista en Sant Cugat y hay alguien que no lo quiere, no lo quiere", ha soltado. "Nosotros lo intentaremos", ha destacado, a la vez que ha pedido tener en cuenta el peso que tienen las relaciones personales en las municipales. Eso puede provocar que en algunas poblaciones pequeñas no sea posible o se complique la configuración de un gobierno independentista. Pero en Barcelona quieren "un gobierno independentista claro y nítido". A las últimas elecciones ya pusieron todo tipo de facilidades para que fuera así, pero no fue posible. Ha evitado precisar si ve ERC con la misma predisposición para limitarse a decir que Junts quiere preparar la mejor candidatura posible después de la renuncia de Elsa Artadi. Una tarea que quieren dejar cerrada antes no acabe el mes de julio.