En un mundo cada vez más acelerado, donde el estrés y la ansiedad forman parte del día a día de muchas personas, encontrar pequeños hábitos que ayuden a mejorar el bienestar emocional se ha convertido en una prioridad. Uno de esos aliados naturales que ha ganado popularidad no solo por sus beneficios físicos, sino también por su efecto sobre el estado de ánimo, es el té verde. Esta bebida milenaria, originaria de Asia, lleva siglos utilizándose por sus propiedades calmantes y saludables, y la ciencia moderna ha confirmado varios de sus efectos positivos en la salud mental.
Tomar té verde a diario reduce el estrés y mejora el humor
Una de las claves del poder del té verde está en un aminoácido llamado L-teanina, presente casi exclusivamente en esta planta. Este compuesto ha sido objeto de diversos estudios, y muchos coinciden en que la L-teanina tiene un efecto relajante, sin causar somnolencia. Actúa sobre los neurotransmisores del cerebro, aumentando los niveles de dopamina y serotonina, conocidos por su papel en la regulación del estado de ánimo, la concentración y la sensación de placer.

Un estudio publicado en la revista científica Nutrients en 2019 demostró que el consumo regular de L-teanina ayudaba a reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés, especialmente en personas sometidas a situaciones de presión constante. A diferencia de otras bebidas con cafeína, el té verde ofrece una combinación muy equilibrada entre energía y relajación: su contenido en cafeína es bajo y, junto a la L-teanina, favorece una concentración calmada, ideal para trabajar o estudiar sin nerviosismo.
Un estudio publicado en la revista científica Nutrients en 2019 demostró que el consumo regular de L-teanina ayudaba a reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés
Pero los beneficios no acaban ahí. El té verde también contiene antioxidantes como las catequinas, que combaten el envejecimiento celular y pueden tener un efecto positivo indirecto sobre la salud mental. Una mente descansada también pasa por un cuerpo más sano. Además, su consumo regular se asocia con una mejor calidad del sueño en comparación con otras bebidas estimulantes, siempre y cuando se consuma con moderación y no demasiado tarde.

Por si fuera poco, el simple acto de preparar y tomar una taza de té verde puede convertirse en un ritual relajante. Tomarse unos minutos para respirar, desconectar y saborear una infusión caliente puede ser un pequeño gesto diario con un gran impacto en el bienestar general. Así que, si estás buscando una alternativa saludable al café o simplemente necesitas una ayuda natural para mejorar tu estado de ánimo en el día a día, el té verde puede ser una gran elección. No es una solución mágica, pero sí un hábito sencillo y eficaz para cuidar cuerpo y mente en tu rutina diaria, algo que nunca debemos olvidar pese al ritmo frenético de la vida moderna.