El papa León XIV ha comenzado este jueves su primer viaje oficial al extranjero, el primer viaje apostólico desde que fue elegido pontífice el pasado mes de mayo y se convirtió en jefe de la Iglesia católica y de los 1.400 millones de católicos en el mundo. Un viaje que tendrá dos paradas, la primera Turquía, donde estará hasta el 30 de noviembre, y posteriormente Líbano, donde continuará esta minigira hasta el 2 de diciembre. Bajo el lema Un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, el papa ha recorrido 1930 kilómetros cruzando el espacio aéreo de Italia, Croacia, Bosnia y Herzegovina, Montenegro, Serbia, Bulgaria y finalmente Turquía -envió telegramas a todos sus dirigentes para saludar a sus pueblos-, y ha aterrizado en Ankara a mediodía, donde fue recibido inicialmente con honores militares por el ministro de Cultura y Turismo, Mehmet Nuri Ersoy, antes de visitar el Mausoleo de Atatürk. León XIV es el quinto pontífice que visita Turquía, después de Pablo VI en 1967, Juan Pablo II en 1979, Benedicto XVI en 2006 y Francisco en 2014. Con este viaje, León ha querido respetar el deseo de Francisco de volver a Turquía por el 1700 aniversario del Concilio de Nicea, un acontecimiento crucial en la historia del cristianismo donde se promulgó la oración del Credo, símbolo de unidad entre los cristianos.
Turquía es clave para este viaje por razones históricas, religiosas y diplomáticas, incluyendo un encuentro con las autoridades turcas y un gesto simbólico de diálogo inter religioso en un país con una fuerte presencia islámica. “Este viaje a Turquía y al Líbano tiene, ante todo, un significado de unidad, celebrando los 1700 años del Concilio de Nicea. Y yo deseaba mucho este viaje por lo que significa para todos los cristianos, pero también es un gran mensaje para el mundo entero. Y, sobre todo, esperamos que mi presencia, la de la Iglesia y la de los creyentes, tanto en Turquía como en el Líbano, pueda anunciar, transmitir y proclamar lo importante que es la paz en todo el mundo”, dijo Robert Francis Prevost a los más de 80 periodistas que le acompañaban en el avión papal. Así, la elección de Turquía como destino del primer viaje apostólico del papa León para conmemorar este aniversario quiere enviar un mensaje como punto de encuentro y hermandad para las diferentes denominaciones cristianas. El Concilio de Nicea es el primer concilio ecuménico del cristianismo, que estableció las bases institucionales y doctrinales del cristianismo universal, católico, ortodoxo y otras tradiciones, consolidando así una identidad compartida.
Inmediatamente después de la ceremonia de bienvenida oficial en el Aeropuerto Internacional de Ankara, León ha visitado el Mausoleo de Mustafa Kemal Atatürk, fundador de la Turquía moderna, conocido como Anıtkabir (que significa literalmente ‘tumba conmemorativa’), acompañado por una delegación oficial que incluía al ministro, al vicegobernador y al comandante del Mausoleo. El pontífice ha firmado en el libro de honor, donde escribió: “Doy gracias a Dios por poder visitar Turquía, e invoco sobre este país y su gente una abundancia de paz y prosperidad”.
Posteriormente, se ha desplazado a Palacio Presidencial para una ceremonia de bienvenida oficial y una reunión privada con el presidente Recep Tayyip Erdoğan, seguida de un discurso ante autoridades y del cuerpo diplomático en la biblioteca nacional de Ankara, donde ha destacado el papel único de Turquía como puente entre culturas y religiones y como conexión entre Oriente y Occidente: “La imagen del puente sobre el estrecho de los Dardanelos, escogida como emblema de mi viaje, expresa eficazmente el papel especial de vuestro país. […] Antes de conectar Asia y Europa, Oriente y Occidente, este puente une Turquía consigo misma, compone sus partes y la convierte, por decirlo así, desde dentro, en una encrucijada de sensibilidades”. El papa estadounidense pronunciará todos los discursos en inglés, su lengua materna, en lugar de utilizar el italiano, como suele hacer.
León se desplazará a Estambul en avión y el momento culminante de la estancia en Turquía será este viernes en İznik -antigua Nicea-, al Noroeste del país y a unos 140 kilómetros de Estambul, a donde se trasladará en helicóptero hacia el mediodía para participar en el encuentro ecuménico de oración cerca de las excavaciones arqueológicas de la antigua Basílica de San Neófito, en el lugar donde se celebró la reunión del año 325 d.C. León XIV, junto con el Patriarca de Constantinopla Bartolomé, líder espiritual de los cristianos ortodoxos del mundo, rezará con una veintena de patriarcas y representantes de iglesias cristianas ante iconos de Cristo y del Concilio y el encendido de una vela. El sábado, el papa visitará la Mezquita Azul, símbolo del diálogo interreligioso, tendrá un encuentro privado con líderes de las iglesias locales en la iglesia ortodoxa siríaca de Mor Ephrem, por la tarde tendrá un encuentro con el Patriarca Bartolomé I y firmarán una declaración conjunta, y posteriormente celebrará una Santa Misa en el Volkswagen Arena. El domingo, último día en Turquía, León XIV visitará la Catedral Armenia Apostólica, participará en la Divina Liturgia, desayunará con el Patriarca Bartolomé I en el Patriarcado Ecuménico, y a primera de la tarde saldrá hacia Beirut, donde se espera la llegada a las 15.45 para continuar el viaje al Líbano, que lo espera en medio de la crisis económica y política que sufre desde 2019 y de los bombardeos repetidos de Israel, a pesar de un alto el fuego.
