Nuevo capítulo de Donald Trump en su cruzada contra las "amenazas a la seguridad nacional" de los Estados Unidos. El departamento de Estado estadounidense ha anunciado este lunes que exigirá fianzas de hasta 15.000 dólares a ciertos visitantes extranjeros con el objetivo de garantizar que no estén más tiempo del plazo establecido por sus visados. De esta manera, toda persona proveniente de un "país con tasas elevadas de sobreestancia de visados" tendrá que abonar un depósito de no menos de 5.000 dólares, al margen de si se trata de un visado de turista o de negocios. Los visitantes que no abandonen el país antes de que caduque el documento de estancia perderán su fianza, mientras que aquellos que cumplan con los plazos del visado recuperarán el dinero. La medida se enmarca en el esfuerzo de la administración Trump por combatir la inmigración ilegal y ha sido calificada de "un pilar clave de la política exterior para proteger EE.UU. de la clara amenaza a la seguridad nacional que representan los excesos de visados y las deficiencias en el cribado y la verificación".
Este anuncio, que recupera una iniciativa emitida por la primera administración Trump en noviembre del 2020 —y que finalmente no se llegó a aplicar—, se ha concebido como un programa piloto de doce meses que permitirá al departamento de Estado evaluar la viabilidad de la publicación, el procesamiento y la emisión de fianzas de visados, en coordinación con el Departamento del Tesoro y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS). El objetivo final es garantizar el estricto cumplimiento de los términos y condiciones de los visados, de manera que todas aquellas personas que visiten temporalmente EE.UU. abandonen puntualmente el país.
A la espera de que se publique la lista de países afectados
El departamento de Estado no ha especificado qué países estarán sujetos al programa, cuestión que se determinará en función de los datos de sobreestancia de visados recogidos y publicados por el DHS. Según este departamento, más de 500.000 personas admitidas en EE.UU. a través de puertos aéreos o marítimos habrían seguido viviendo en el país después de que acabara su periodo de estancia autorizada. La lista de países afectados se publicará en el portal web "Travel.State.Gov" al menos 15 días antes de que el programa entre en vigor, y quedará sujeto a posibles cambios futuros. Desde su retorno a la Casa Blanca, Donald Trump ha tomado medidas enérgicas para regular la inmigración en Estados Unidos, incluyendo la finalización del estatus de protección temporal para muchas personas que viven en el país y la prohibición total de los visados de inmigración para 12 países concretos, principalmente de Oriente Medio y África. Los ciudadanos del Chad, Eritrea, Haití, Myanmar y el Yemen, todos ellos ya bajo restricción de entrada en EE.UU., presentaban tasas elevadas de sobreestancias de visado, según el DHS. Otros países que presentan una situación similar son Burundi, Yibuti y Togo, hecho que los convierte en potenciales candidatos a verse afectados por esta nueva medida de control sobre los visados.
La política migratoria de Trump sacude el turismo en EE.UU.
El anuncio de esta nueva medida de control sobre el flujo de personas que visitan EE.UU. llega precisamente en un momento en que el país sufre una fuerte bajada del turismo, con una disminución del 11,6% de visitantes extranjeros en marzo. Entretanto, el Departamento de Estado presentó el mes pasado nuevas directrices que permiten a las autoridades revisar la actividad en línea de los estudiantes extranjeros antes de emitir visados educativos y de intercambio, a la vez que han aumentado los casos de turistas y visitantes con visados válidos que acaban retenidos por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas. Todo ello parece haber generado el rechazo de muchos extranjeros a visitar Estados Unidos, temerosos de encontrarse con problemas derivados de la cada vez más intensa política migratoria de Trump. De momento, la industria turística estadounidense ya estima pérdidas de miles de millones de dólares este año a causa de las acciones de su presidente.