El consorcio europeo de observación de vida salvaje ENETWILD y la red de expertos del Observatorio Europeo de Fauna Silvestre han elaborado el primer mapa a escala europea, armonizado y con alta resolución, sobre la población de jabalíes. La población en todo el territorio europeo oscilaba entre 13,5 y 19,6 millones de ejemplares antes de la aparición del último brote de peste porcina africana, según los datos del mapa. En Catalunya, son 200.000. Y en el conjunto del Estado, unos 2,4 millones. El principal objetivo de esta iniciativa era pasar de simples índices de abundancia —saber si hay muchos o pocos— a estimaciones de densidad, es decir, a saber el número de ejemplares por kilómetro cuadrado.

El estudio señala que, a pesar del incremento medio anual de capturas de jabalí a través de la caza en los últimos diez años, las poblaciones han experimentado un crecimiento “constante y acelerado”. Así, sostiene que esto puede suponer un “riesgo crítico” para la salud animal y la economía rural, por la propagación potencial de enfermedades infecciosas como la peste porcina africana. El mapa muestra una mayor presencia del jabalí en los países más occidentales, incluyendo España, Francia, Italia, el centro de Europa y la costa adriática, mientras que su densidad disminuye hacia el este y, sobre todo, hacia el norte del continente, a excepción de Noruega, que cuenta también con numerosos animales. En el caso de la península Ibérica, el mapa muestra diversas áreas de una “densidad poblacional extrema”, especialmente “preocupantes” en el caso del corredor mediterráneo desde el sur de Francia y Catalunya hasta el sureste de España, donde también existen “elevadas concentraciones de ganado porcino y vías de comunicación”.

“La única herramienta capaz de afrontar retos biológicos que no entienden de fronteras”

Hasta ahora, la gestión de la creciente población de jabalíes se enfrentaba al obstáculo técnico de la fragmentación de datos, sostiene el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos, ya que cada país europeo usaba métodos diferentes para contabilizar la cantidad de jabalíes en su territorio. Pero ahora este mapa resuelve el problema al armonizar la información y permitir así una visión global que posibilitará actuar de forma coordinada y eficiente. Los resultados permiten “más realismo biológico, mejor comparabilidad entre países y una aplicación directa en modelos epidemiológicos y de análisis de riesgo”, apuntan desde el IREC, ya que el mapa ha sido calibrado con datos reales recogidos en torno a 80 puntos de observación repartidos por toda Europa. Este trabajo, sostienen, “marca un antes y un después en la vigilancia sanitaria europea” y pone de relieve que la cooperación científica internacional es “la única herramienta capaz de enfrentar retos biológicos que no entienden de fronteras”.

La Red de Seguimiento de Fauna Silvestre Terrestre en España (FAUNET) del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha permitido un “intenso seguimiento” mediante fototrampeo en decenas de poblaciones de España, ya que los datos precisos de densidad ayudan a entender la dinámica de transmisión, la persistencia y la propagación de la peste porcina africana, además de mejorar la eficacia de la vigilancia sanitaria, la búsqueda de cadáveres y las medidas de control. El IREC explica que las estadísticas de caza también pueden convertirse en una “potente herramienta de gestión” para evaluar el control poblacional del jabalí, ya que, al combinar los modelos de densidad de alta resolución con datos oficiales de capturas, se puede estimar las “tasas de extracción” con gran resolución espacial y evaluar si la actual “presión cinegética” es suficiente para reducir las poblaciones y limitar la propagación de la enfermedad.