Un tratamiento rápido puede ser definitivo a la hora de enfrentarse a una enfermedad. Por eso es importante estar atentos a una serie de signos en nuestro organismo que nos pueden indicar la existencia de alguna patología que todavía no ha dado la cara. Estos son algunos indicadores que puedes observar a simple vista.

Encías inflamadas

La inflamación de las encías suele ser muy molesta y dolorosa. A veces, se produce por una acumulación de placa bacteriana por una incorrecta higiene, pero hay que estar atentos por varios motivos. Por ejemplo, puede deberse a una periodontitis, una enfermedad que daña el tejido de esta zona del cuerpo y luego afecta al hueso que sostiene el diente pudiendo provocar su caída. También puede ser indicio de estar sufriendo una enfermedad cardiovascular.

Uñas más gruesas y curvadas

Las uñas son unas grandes delatoras de enfermedades. Un cambio de color, de forma o de volumen es relevante. En el caso de que se vuelvan más gruesas o  curvadas, se debe acudir a un médico. Puede que sea por una infección por hongos o algo más importante, como una patología cardíaca.

Fractura de muñeca

Las fracturas de muñeca se suelen producir en las primeras etapas de la osteoporosis. De hecho, son uno de los signos de alarma. Si se producen con frecuencia o debido a golpes que no debieran revestir esa gravedad, es aconsejable contar con la opinión de un especialista. Sobre todo en el caso de mujeres postmenopáusicas.

Cambios de humor

Las personas mayores que sufren de repente cambios de humor constantes y presentan una cierta agresividad pueden estar desarrollando la enfermedad de Alzheimer. Si además se sienten confundidas, deprimidas o ansiosas, sobre todo cuando están fuera de su ambiente, nos encontramos ante los primeros indicios patentes de padecer esta enfermedad.

Enrojecimiento ocular

El enrojecimiento continuo de un ojo puede ser un indicio de padecer glaucoma. Según la OMS, es la segunda causa de ceguera en personas mayores de 40 años y es muy importante detectarlo con premura porque puede desarrollarse con rapidez. Al principio, las personas no se dan cuenta de que la padecen y cuando se presentan más síntomas puede ser demasiado tarde.

Orina de color oscuro

Es también importante estar pendiente de los cambios de color en la orina. En el caso de que adquiera un tonalidad muy oscura, nos puede estar indicando de que existe un problema en el hígado. Si no se toman medidas, se puede producir insuficiencia hepática, un trastorno muy grave.

Melasmas

Los melasmas se producen debido al aumento de melanina en la epidermis y en la dermis. Son manchas oscuras, de color café, que se producen generalmente en las mejillas, la frente, la nariz y el labio superior. Normalmente se deben al sol o a los cambios hormonales debido al embarazo, por ejemplo. Pero a veces son síntoma de un problema de tiroides.