Salir, conocer gente, chatear un poco por unas apps, quedar para tomar algo y lo que surja. Si antes de la pandemia era un hecho habitual, ahora quizás no tanto. El coronavirus ha tenido un impacto a nuestras vidas, eso es un hecho innegable. También a la hora de conocer a alguien y en las relaciones personales.

Ahora, sin embargo, un estudio ha descubierto que el miedo de coger el coronavirus podría haber beneficiado a las parejas en relación con su vida sexual. Realizada por psicólogos de la Universidad de Lisboa y el Instituto Kinsey en Indiana, la investigación publicada en The Journal of Sex Research de la que se hace eco el diario británico The Independent, ha analizado a 303 adultos con implicaciones sexoafectivas en un estudio transversal. Así que, para notar estos beneficios a tu vida sexual, tendrías que estar aparejado –de una manera u otra–.

En este sentido, la investigación ha encontrado varios cambios en el estilo de vida que se han asociado con el deseo sexual positivo, pero solo para los participantes con un miedo alto (ante gente con un miedo relativo o bajo) a infectarse por la covid".

¿Más o menos deseo sexual?

"Para estos participantes, el deseo sexual se ha asociado con cambios positivos en la vida sexual y el deseo de pasar tiempo con la pareja, pero no con la calidad general de la relación", destaca el estudio y se hace eco el mismo diario. Eso sí, también se resalta una mención especial y constata que los resultados fueron consistentes después de controlar la ansiedad relacionada con la pandemia y las variables demográficas. "Este estudio avanza la literatura centrada en la importancia de las relaciones 'románticas' en situaciones que provocan estrés como la pandemia al llevar luz sobre la asociación entre el deseo sexual y el bienestar personal y relacional", destacan a los autores.

Estos hallazgos, sin embargo, van en contra de algunas investigaciones anteriores que dicen que la pandemia había provocado una disminución general del deseo sexual entre las parejas. De hecho, en el 2020, un estudio publicado en la revista Leisure Sciences encontró que la mitad de los 1.559 adultos encuestados habían descubierto que el coronavirus había tenido un impacto negativo en su vida sexual. Como todo, siempre hay matices porque también se descubrió que los que eran sexualmente activos se habían vuelto más aventureros sexualmente, con uno de cada cinco participantes "expandiendo su repertorio sexual incorporando nuevas actividades".

'Nuevas actividades'

¿Y cuáles eran estas 'nuevas actividades'? Pues según se destaca que las acciones más comunas eran sexting, probar nuevas posturas sexuales o compartir posturas sexuales.

En este sentido, tal como destaca el mismo informe "a los participantes que hicieron nuevas incorporaciones tenían tres veces más probabilidades de informar mejoras en su vida sexual". Así, a pesar de los cambios forzados, destaca el estudio que "se están adaptando a su vida sexual de manera creativa".

 

 

Imagen principal: un chico y una chica sobre una cama / Unsplash