Toni Comín también ha reclamado la abstención de los tres magistrados del Tribunal Constitucional recusados por Carles Puigdemont, según han informado fuentes jurídicas a Efe y ha confirmado ElNacional.cat este martes. Así, el eurodiputado de Junts ha pedido la recusación de tres magistrados conservadores del tribunal de garantías, hecho que paraliza la admisión a trámite de su recurso contra la decisión del Tribunal Supremo de no aplicarle la ley de amnistía. Es decir, que Comín ha actuado igual que Puigdemont, que este lunes presentó un incidente de recusación contra la magistrada Concepción Espejel y los magistrados Enrique Arnaldo y José María Macías, en la víspera del día señalado para la admisión del recurso. La misma recusación contra los mismos magistrados y por los mismos motivos que el president en el exilio.

Al fin y al cabo quiere decir que su recurso de amparo seguirá pendiente de admisión, ya que será necesario tramitar la recusación y, una vez resuelta, volver a empezar el trámite de admisión. Como consecuencia, las fuentes consultadas por Efe explican que la maniobra de Comín implica como mínimo un mes de retraso, para la resolución del recurso igual que con el de Puigdemont. El pleno del Constitucional tenía previsto admitir a trámite este martes los dos recursos contra la decisión del Supremo de no aplicarles la amnistía por el delito de malversación.

El escrito presentado por Puigdemont y Comín

Además, según ha podido saber ElNacional.cat, los escritos presentados por Puigdemont y Comín han abocado el pleno del Constitucional a posponer también la admisión a trámite del recurso de amparo de Lluís Puig, que era el único que no había presentado ninguna petición de abstención. El ponente de su caso es Arnaldo, que ha sido recusado por Puigdemont y Comín, y ha verbalizado que prefería esperar a que se resolvieran las peticiones de los dos políticos en el exilio antes de participar en la admisión de un recurso que tenía el mismo objeto y objetivo que los otros dos. Por tanto, la aceptación de los tres recursos quedará para más adelante.

En el escrito presentado este lunes por el abogado Gonzalo Boye —al cual tuvo acceso ElNacional.cat— se argumentaba que los tres magistrados tienen "apariencia de falta de imparcialidad" por su "frontal oposición a la ley de amnistía", y que, incluso, han mostrado "animadversión" hacia Puigdemont. Ya se había adelantado que este martes el tribunal desestimaría la urgencia de retirar la orden de detención contra los dos, crearía una pieza separada y analizaría el fondo del caso. Pero el movimiento de Boye obligará el Constitucional a aparcar la admisión a trámite de los recursos y abrir una pieza con las recusaciones. Concretamente, el abogado precisaba que, si los magistrados no se abstienen, los recusará, y para este procedimiento pide que declaren como testigos los tres miembros del tribunal.

Las recusaciones de Espejel, Arnaldo y Macías

La petición de Comín y Puigdemont se interpreta como un paso para ganar tiempo para que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) dé su opinión sobre la amnistía, y si afecta o no el derecho de la Unión Europea. En parte, la mayoría de miembros del Constitucional son partidarios de esperar la sentencia de Luxemburgo, que se espera para este otoño o a finales de años. Con todo, el presidente del tribunal de garantías español, Cándido Conde-Pumpido, descartó la petición de los miembros conservadores sobre detener el debate de la amnistía, avalada por la mayoría de los miembros de la sala. En la primera sentencia, el tribunal no se pronunció sobre si el delito de malversación imputado a los organizadores del referéndum es amnistiable, mientras que el TJUE sí que lo hará.

Con respecto a Espejel, la recusación se fundamenta en "su pertenencia a la denominada Asociación Profesional de la Magistratura y su estrecha vinculación en el Partido Popular, responsable de su promoción al cargo de magistrada del Tribunal Constitucional". De Arnaldo también se sostiene que es un candidato propuesto por el PP, que se ha mostrado favorable a la condena de Puigdemont, y se detalla que "tiene una relación de amistad, públicamente reconocida, con el señor José Manuel Maza Martín, en aquellos tiempos fiscal general del Estado que impulsó la querella contra Puigdemont y su Gobierno" en 2017, y también con Manuel Marchena y Antonio del Moral García —presidente, el primero, y magistrado, el segundo, de la sala de lo penal del Supremo, que condenó a los líderes independentistas. Finalmente, de Macías se expone que comparó el presidente al exilio "con los nazis y otros movimientos totalitarios europeos", aparte de expresar otras descalificaciones hacia el independentismo—.