El fin de semana es momento de relajarse y desconectar del trabajo, los estudios y olvidar, durante unas horas, la rutina semanal. Son dos días para hacer otros planes, salir de casa u, otra opción muy válida, quedarse en el sofá abrazando la manta y mirando series y películas. Los sábados y domingos, sin embargo, también resultan ser una oportunidad excelente para descubrir aquellos restaurantes que nos llaman más la atención, pero que entre semana es imposible visitarlos por la falta de tiempo. Para que no tengas que perder tiempo pensando a dónde ir, desde La Gourmeteria te recomendamos 4 restaurantes para probar durante el fin de semana y disfrutar de magníficos platos y lugares.
4 restaurantes en la Barceloneta que son excepcionales
El sol y las temperaturas van ganando terreno poco a poco y los restaurantes con terrazas, vistas y ubicaciones veraniegas sacan pecho ahora que el verano se acerca. Aunque nos apasiona recomendar restaurantes fuera de Barcelona para hacer país y mostrar una gastronomía fantástica por todo el territorio como, por ejemplo, en el Maresme o en el Baix Llobregat, también optamos por mostrar la cara más gastronómica y alegre de Barcelona. Por esta razón, para este fin de semana desde La Gourmeteria descubrimos 4 restaurantes de la Barceloneta donde comer bien.
Azul Rooftop Barceloneta: flotar encima del mar
“El Azul Rooftop tiene un espíritu y una esencia de un local de moda”, explica el chef francés Romain Fornell. Establecido en Barcelona, propone una gastronomía de mar, brasa y cócteles en el nuevo Azul Rooftop en la Barceloneta. Ubicado en la planta 8 del Paseo de Joan de Borbó, 101, es un espacio abierto en la primavera de 2023 y que enamora a todos los barceloneses y visitantes que se quieren dejar cautivar y deleitar por sus platos y sus impresionantes (y vertiginosas) vistas de 360 grados. Comida de altísimo nivel mientras tienes la sensación de flotar encima del mar. Maravilloso y excepcional.
Cova Fumada: un secreto de 75 años
Paseando por la calle Baluard de la Barceloneta nos encontramos la mítica Cova Fumada, una bodega familiar de los de antes que no tiene ningún letrero en la puerta ni falta que hace, ya que los parroquianos ya la conocemos y los guiris, desgraciadamente, también. Pues bien, en este local emblemático se inventó hace más de setenta años la primera bomba, una pelota de patata rellena de carne y rebozada con salsa picante por encima. Las gruesas puertas de madera que atraviesas al entrar en el local te transportan irremediablemente a tiempos pasados: a la izquierda te encuentras la barra de mármol blanco pintada con lápiz por todas partes con las cuentas de los clientes y siempre llena de alcachofas a la brasa, mejillones con mayonesa, buñuelos de bacalao, recortes de calamar, pulpo y como no, las famosas bombas.
Altamar Restaurante: la torre gastronómica de Barcelona
Un hexágono espacial (y especial), Barcelona en la espalda, el horizonte del mar en frente, 360 grados de vistas espectaculares y un menú gastronómico delicioso para celebrar el vigesimoquinto aniversario del Altamar restaurante (paseo de Joan de Borbó, 88). A 75 metros de altura, se presenta todo este cóctel para convertirse en una explosión única de sabores. De hecho, para acceder tienes que coger el ascensor y, en el transcurso de estos pocos segundos, te posee la sensación de una transformación gastronómica que hace clic. Como las puertas del elevador cuando se abren y te dan la bienvenida a un confín marítimo y un cielo naranja que se pone tras el Tibidabo. Escoger con qué vistas compartirás la comida, te aseguro que no será una decisión fácil.
Restaurante 1881: los mejores arroces de señorito
El restaurante 1881, ubicado en la última planta del Museo de Historia de Catalunya, donde antes había los Almacenes Generales de Comercio, tiene una carta con un ideario afinado que la hace muy versátil: para hacer honor al lugar que ocupa, pretende hacer lucir la historia de la cocina catalana, por eso se pueden encontrar clásicos como los buñuelos de bacalao o el arroz del señorito. Ahora bien, hay muchas concesiones en la siempre bienvenida cocina vasca (el restaurante es parte del grupo Sagardi), en forma de pochas con morro de bacalao y almejas, el chuletón o los piquillos de Tolosa y, también, otros más internacionales que ya se han implantado a nuestro día a día, como el ceviche de corvallo salvaje o el tartar de vaca. El resto de la oferta lo configuran platos que nos hermanan con nuestros vecinos del norte: marisco y pescado a la parrilla, tanto de la Cofradía de Pescadores de Barcelona como de la embarcación Itsas Lagunak de Hondarribia.