Con la llegada del otoño, los postres con calabaza se convierten en protagonistas, y esta vez ha sido la creadora catalana @clarafogons quien ha enamorado a sus seguidores con una receta que combina lo mejor de la tradición y el sabor de temporada: unos dónuts de calabaza irresistibles. Según explica en su publicación, esta versión otoñal conserva la textura esponjosa y tierna de los dónuts clásicos, pero con un toque dulce y suave que solo la calabaza horneada puede aportar. Asegura que son idénticos a los originales en la masa, pero mucho más aromáticos y con una miga tan ligera que resulta imposible comer solo uno. Además, diferencia sus dónuts de los que se hornean en molde, señalando que los suyos son los auténticos, con esa textura chiclosa y aireada que se consigue solo cuando se fríen con paciencia.
Una cocinera catalana revela su receta de dónuts de calabaza
La cocinera catalana cuenta que cada otoño experimenta con recetas que giran en torno a la calabaza y que esta es una de sus favoritas. No solo por su sabor, sino porque, pese a parecer laboriosa, es una preparación sencilla y muy agradecida. El truco, según explica, está en respetar los tiempos de levado y en dejar reposar los dónuts ya formados durante al menos 30 minutos antes de freírlos. Si no tienes un molde especial, puedes usar algo tan simple como un vaso de cristal para cortar la masa y un tapón o tapita para hacer el agujero central. Y si prefieres hornearlos, también se puede, solo hay que cortarlos igual y llevarlos al horno en lugar de freírlos. El resultado, de cualquier manera, son unos dónuts tiernos, aromáticos y deliciosos, perfectos para acompañar un café o un chocolate caliente en las tardes más frías.
Ingredientes de los dónuts de calabaza:
- 375 g de harina
- 45 g de azúcar
- 100 g de calabaza asada
- 120 g de leche
- 4 g de levadura seca
- Una pizca de sal
- 1 huevo
- 30 g de mantequilla
- Azúcar vainillado
Para la cobertura:
- Azúcar glas + agua
- O bien azúcar + canela
Preparación de la receta:
Primero se elabora una masa suave y homogénea con todos los ingredientes, que se deja reposar hasta que doble su volumen. Una vez lista, se estira sobre la superficie y se corta con un molde o con un vaso. Los dónuts ya formados se dejan reposar de nuevo hasta que vuelvan a subir, un paso esencial para lograr esa textura aireada y tierna. Luego se fríen a fuego medio-suave, hasta que estén dorados por ambos lados. Al sacarlos, se pueden cubrir con una mezcla de azúcar glas y un poco de agua, o bien rebozarlos en azúcar y canela. Los que no lleven agujero se pueden rellenar con crema, mermelada o chocolate, al gusto.

Es importante dejarlos reposar hasta que doblen su volumen
Estos dónuts de calabaza son una oda al otoño, una receta casera que combina sencillez, aroma y tradición. Porque cuando algo está hecho con el corazón, como dice Clara, el resultado no solo se nota, se saborea.