A pesar de la victoria ante el Atlético de Madrid, en el Barça hay cierta preocupación por el nivel de Pau Cubarsí. El joven central, que la temporada pasada fue una de las grandes revelaciones del equipo, atraviesa ahora uno de los peores momentos de su corta carrera. El vestuario empieza a inquietarse y varios jugadores han expresado su preocupación por su rendimiento, que consideran insuficiente para sostener al equipo en partidos clave.
La acción que encendió todas las alarmas llegó ante el Atlético de Madrid. Cubarsí se quedó enganchado al tirar la línea del fuera de juego y habilitó a Baena, facilitando el primer gol del conjunto colchonero. Un error que dolió, pero que, según voces internas, no es un caso aislado. Muchos dentro del grupo aseguran que ya no es el mismo futbolista sólido, valiente y fiable que deslumbró la temporada pasada.
El vestuario considera que se ha convertido en un lastre
Algunos jugadores han llegado a manifestar que, ahora mismo, Cubarsí es un lastre para el equipo. Su irregularidad está pasando factura y genera dudas en situaciones defensivas que antes parecían bajo control. Lo más llamativo es que, según varias fuentes del vestuario, Gerard Martín está ofreciendo un rendimiento más fiable, pese a no ser central natural. Ese contraste ha aumentado todavía más el debate interno.
Y es que la defensa del Barça vive un momento frágil. Flick necesita seguridad, necesita orden y necesita jerarquía, y lo que más preocupa es que, ahora mismo, Cubarsí no está aportando ninguna de esas tres. En los entrenamientos se le ve dubitativo, menos contundente y sin esa claridad en la salida de balón que lo convirtió en uno de los grandes tesoros de la cantera. El bajón está ahí y todos lo perciben.
La confianza del vestuario se rompe poco a poco
El problema va más allá del rendimiento puntual y la confianza se está deteriorando paso a paso. Algunos futbolistas creen que Cubarsí debería pasar por un proceso de calma, quizás menos titularidades, más trabajo interno y menos presión. Otros, directamente, consideran que no está preparado para ser indiscutible y que Flick debería apostar por alternativas hasta que el joven central recupere su mejor versión.
Así pues, el debate está abierto y la preocupación es real. Cubarsí, que hace un año parecía indestructible, hoy aparece señalado. El Barça necesita que vuelva a ser ese talento descomunal que enamoró a Europa, pero la pregunta es si podrá recuperarlo pronto o si el vestuario seguirá perdiendo la fe en él.
