Tras no pasar del empate contra el Almería de manera sorprendente, Míchel Sánchez sabe que tiene que buscar refuerzos. El pinchazo contra el conjunto andaluz es el primer aviso para el Girona de que puede acabar cayendo de la lucha por la Liga si no se refuerza y amplía su plantilla. Con la baja de Aleix Garcia por sanción, el técnico madrileño sabe que necesita un suplente de garantías.
Por ello, ha pedido a su club que busque en el mercado un centrocampista que pueda aportar la clarividencia y manejo del balón que garantiza el de Ulldecona. Una petición, que además tiene que ser de rendimiento inmediato, y a la cual la dirección deportiva ya ha encontrado respuesta, según Catalunya Ràdio. El elegido para llegar este mercado de invierno es Sergi Darder.
Sergi Darder, el candidato ideal para el Girona
El mediocentro no está viviendo su mejor momento en el Mallorca. Después de su polémica salida del RCD Espanyol, el excapitán perico no está contando con la confianza de su entrenador, Javier Aguirre. Aunque no está viviendo su mejor momento, Quique Cárcel, director deportivo del conjunto gerundense, considera que recuperará su mejor nivel en un entorno adecuado.
La intención del club blanc-i-vermell es ofrecer al Mallorca una cesión con opción de compra obligatoria si el equipo se clasifica para la Champions League. Tal como se encuentra el equipo, a once puntos del quinto clasificado (con un partido más), se debería de producir una debacle en la segunda vuelta para que no acabase consiguiendo plaza para la máxima competición europea. Especialmente, si consigue reforzarse con Sergi Darder, que aportaría calidad y veteranía al equipo.
Nico González, una opción en la recámara
El centrocampista español tiene contrato hasta 2028 con el conjunto mallorquín, por lo que la negociación no será fácil. Si finalmente la operación no se puede llevar a cabo en las condiciones que quieren ambos clubes, el Girona tiene guardada una bala en la recámara. Esta tiene el nombre de Nico González.
El actual mediocentro del Porto, como Sergi Darder, tiene experiencia en el fútbol catalán. Acostumbrado al juego combinativo del Barça, su adaptación al estilo de Míchel no debería de ser un problema. Sin embargo, su juventud (22 años) lo hace una opción menos fiable que la del jugador del Mallorca. La opción de su cesión sería, en cambio, más viable. El gallego apenas está contando con minutos en su equipo, y una salida en forma de cesión le permitiría crecer como futbolista.