El Barça vuelve a encontrarse un escenario incómodo en la gestión de su plantilla y como ya parece tradición, el protagonista es Frenkie de Jong. El centrocampista neerlandés no contempla una salida si el club no le paga íntegramente lo que tiene firmado. Su postura es firme y recuerda mucho a la estrategia seguida por Ter Stegen durante el verano, que optó por aguantar, incluso sin protagonismo, mientras el contrato esté vigente.

En el Barça ya asumen que el caso De Jong será uno de los más complejos del próximo mercado de verano si no recupera la titularidad y el buen nivel. Y es que, pese a haber perdido peso en el equipo y a no ser una pieza imprescindible para el proyecto actual, el futbolista no tiene ninguna prisa por marcharse. Su situación contractual le permite resistir sin ceder terreno y él, como siempre, va a querir seguir de blaugrana.

De Jong no piensa perdonar ni un euro

Frenkie de Jong no quiere salir y mucho menos, perdonando ni un solo euro de su salario. El neerlandés renovó hace poco y percibe alrededor de 8 millones de euros netos por temporada, una cifra propia de una de los mejores jugadores del Barça. Si el club quiere forzar su salida, deberá compensarle económicamente de forma muy significativa.

EuropaPress 7126048 frenkie jong of fc barcelona laments an own goal scored by jules kounde

De Jong es feliz en Barcelona a nivel personal, y no siente la necesidad de cambiar de aires. A pesar de haber perdido el puesto y de generar más frustración que simpatía en parte de la afición, el centrocampista prefiere mantenerse en el club antes que aceptar una salida. En su entorno tienen claro que no habrá rescisión amistosa para romper el contrato. Si llega una propuesta de salida, será siempre bajo la premisa de cobrar lo pactado o mantener el sueldo en su nuevo club. El precedente de Ter Stegen refuerza esta estrategia de resistencia.

El Barça, atrapado por un contrato pesado

Desde el conjunto culé la situación genera malestar. Deportivamente, De Jong ha asumido un papel secundario, pero su salario condiciona cualquier planificación. Liberar masa salarial es uno de los grandes objetivos del Barça, y el contrato del neerlandés es uno de los más difíciles de gestionar. La dirección deportiva sabe que forzar la situación puede acabar en un conflicto largo y costoso. De Jong no tiene intención de facilitar su salida de ninguna manera.

Además, su rendimiento irregular y la desconexión con parte de la grada no parecen preocuparle en exceso. El jugador entiende que cumple y que la responsabilidad de resolver la situación es del club. Así pues, el plan de Frenkie de Jong es clarísimo. Si el Barça lo quiere fuera, tendrá que pagar. Si no, se quedará como Ter Stegen.