El Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado este lunes que abrirá al público el refugio antiaéreo de la plaza de la Revolució a partir de este 12 de agosto. Coincidiendo con la Fiesta Mayor de Gracia, el Taller de Historia de Gracia y el Centro de Estudios empezarán las visitas por este espacio, que tendrán un coste de 3 euros. De la construcción original del refugio, el Ayuntamiento ha calculado que se conserva una "mínima parte", aproximadamente un 5%, en la que hay un pequeño tramo de galería, un espacio de botiquín y una sala de cuidados.

Según los expertos, este refugio situado en el subsuelo de la plaza tenía capacidad para unas cuatrocientas personas. Actualmente, se accede desde la planta -4 del parking existente. El presidente del Taller de Historia de Gracia, Josep Maria Contel, ha destacado que el refugio tiene dos elementos distintivos, un pequeño lavabo de manos y un cuadro de luces con dos corrientes, y ha explicado que cuando las llaves se encontraban en el parking "venía cualquier persona a cualquier hora y hacía lo que quería dentro". "Al final el ayuntamiento pensó que se tenía que rehabilitar y cogió las llaves", ha asegurado Contel.

Ahora, durante la Fiesta Mayor de Gracia, se abrirá por primera vez al público. El coste total de las obras de conservación y restauración del espacio y "museización" ha sido de 30.933 euros. Durante los días de la fiesta mayor se instalará un mostrador informativo en la plaza del Diamant, donde se podrán hacer las reservas. Una vez pasadas las fiestas del barrio, se podrán concertar a través de la página web del Taller de Historia de Gracia.

Galería del refugio antiaéreo / Foto: David Zorrakino / Europa Press

 

Sala del refugio antiaéreo de la plaza de la revolució / Foto: David Zorrakino / Europa Press

 

El pequeño lavabo del refugio antiaéreo / Foto: David Zorrakino / Europa Press

Un refugio considerado excepcional

El presidente del Taller de Historia de Gracia ha subrayado que este es uno de los mejores refugios que ha visto: "Tenía agua corriente, doble electricidad, bomba de agua y cisterna". "Era un refugio que la gente de aquí se había trabajado mucho", ha añadido. De hecho, la parte restaurada corresponde a un fragmento del pasillo y a dos cámaras destinadas al botiquín y a una enfermería, que cuenta con un armario, un pequeño mostrador de obra y un lavamanos, así como un banco de obra y un cuadro eléctrico. El refugio tenía un desagüe en el centro de la estancia y cuatro agujeros para encajar una litera. El espacio también tenía un servicio "a la turca" para hombres, y uno con taza para mujeres.

En los paneles informativos se recogen documentos gráficos que hablan de la organización del vecindario para la construcción del refugio el año 1937, de cómo se hizo el refugio y de cómo se organizaba. También se conservan planos a través de los cuales se han podido recrear las dimensiones originales de la construcción, que posteriormente han sido dibujadas al suelo de la planta -4 del parking subterráneo.