El lanzamiento de una alerta generalizada en el móvil de los catalanes el miércoles por la noche para advertirles del riesgo del temporal que barrió el país durante la madrugada y la mañana de ayer, ha reabierto el debate sobre las ES-Alert, afectadas por el síndrome de la DANA que provocó 229 muertes en la Comunidad Valenciana hace un año. El sonido potente y estridente de estos avisos provocan algunas quejas entre la ciudadanía, y encontrar el equilibrio entre el exceso y la conveniencia de la activación de este tipo de alertas también reabrió el debate político, ante el riesgo de que demasiadas alertas puedan acabar provocando rechazo entre la población y un efecto contrario y reducir la eficacia del sistema El Parlament aprobó este miércoles una moción de Junts que incluye instar al Govern a revisar los protocolos de las ES-Alert. Desde el Ejecutivo de Salvador Illa se defiende el envío de la alerta por este último episodio de lluvias intensas, argumentando que “es mejor pecar por exceso que por defecto”, como expresó el conseller de Empresa i Treball, Miquel Sàmper, que era mejor avisar a la población antes de ir a dormir para que pudiera planificarse el día siguiente, y que los datos lo avalan. Según datos de Trànsit, que anunció la consellera de Interior, Núria Parlon, este jueves entraron en Barcelona 22.000 coches menos que el mismo día del año pasado. Aun así, el Govern admite que hay que hacer cambios y Protecció Civil ya ha anunciado que está trabajando para incorporar prealertas de emergencias que, a diferencia de la ES-Alert enviada el miércoles, servirá para avisar de forma preventiva con un sonido que no será tan invasivo y alarmante. “Las prealertas móviles servirán para situaciones en las que el riesgo no sea inminente y el sonido de la alarma no será tan estridente”, explicó la directora general de Protecció Civil, Marta Cassany.
En una entrevista al programa No ho sé de RAC1, Cassany hizo añadir que estas prealertas “estarían pensadas para situaciones preventivas, antes de que el riesgo sea inminente. Se darán juego en este tipo de situaciones para poder anticipar episodios”, argumentó, aunque no concretó cuándo estas prealertas estarían disponibles para poder utilizarlas, dado que la herramienta depende del gobierno español y del Ministerio del Interior. En este sentido, la subdirectora de Protección Civil, Imma Soler, había explicado a 3Cat que el Ministerio del Interior ya prevé añadir al sistema ES-Alert avisos para situaciones de menor riesgo con un sonido más suave y menos invasivo, y que el ejecutivo estatal ya tiene la herramienta en previsión y desarrollada, articulada “como una especie de prealerta”, y se podrá deshabilitar en el teléfono móvil si la persona considera que no le interesa recibirlas.
El sistema ES-Alert responde a una directriz europea que insta a cada país a crear una plataforma de avisos como esta. La plataforma la crea y la gestiona el Ministerio del Interior, y las comunidades autónomas son usuarias, según ha explicado Soler. En este sentido, la subdirectora de Protección Civil ha explicado que la herramienta "es joven" -se empezó a testar en 2023- y tiene "mucho desarrollo" por delante. Uno de estos desarrollos es la "gradación de alertas menos estridentes, menos incisivas en la vida de la persona y que también dé la posibilidad de anularla". Una opción que podría ser útil en colectivos vulnerables como por ejemplo personas afectadas por enfermedades mentales. Soler ha explicado que es un colectivo que les preocupa porque "a veces estos sonidos estridentes les afectan muchísimo".
Las ES-Alert no están obligadas a tener exactamente el mismo sonido en toda Europa, aunque existen estándares comunes para el protocolo EU-Alert que buscan armonizar la experiencia y garantizar que sean reconocibles y efectivas en situaciones de emergencia. Cada país adapta el sistema a su legislación y puede especificar detalles técnicos como sonidos y modalidades, siempre que cumplan con las directrices europeas sobre eficacia y accesibilidad. La normativa europea establece desde 2018 la obligación de que todos los países miembros dispongan de sistemas de alerta pública basados en la telefonía móvil, utilizando la tecnología Cell Broadcast. El sonido debe ser estridente, persistente y capaz de sobresalir incluso cuando el teléfono está en modo silencio, para captar la atención del usuario por fuerza mayor. Este sonido es obligatorio para el nivel 1 de alerta (amenaza extrema), que no puede ser desactivado por el usuario. El objetivo es garantizar que el mensaje de emergencia sea recibido con la máxima atención inmediata posible. Cada estado miembro define su propia variante nacional (como ES-Alert en España, FR-ALERT en Francia y NL-ALERT en los Países Bajos), lo que puede incluir diferencias en el sonido específico, aunque todos deben cumplir con la función de aviso urgente. Los diferentes tipos de mensaje (alerta extrema, grave, informativa, pruebas) pueden tener variantes en el formato y el sonido según la legislación local.
