Volver atrás en el tiempo es imposible, pero, ¿qué habría pasado si durante la primera ola del coronavirus se hubiera actuado diferente? ¿Qué habría pasado si el confinamiento hubiera empezado unos días antes? ¿Y si lo hubiera hecho unos días después? Precisamente aborda esta cuestión el estudio donde ha participado el físico e investigador Àlex Arenas, al lado de otros compañeros del Departamento de Ingeniería Informática y Matemáticas de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona.

La principal conclusión que se extrae es que durante la primera ola del coronavirus en España hubo unos 28.000 muertos. Si se hubiera adelantado el confinamiento solo 7 días, el número de muertos habría sido, aproximadamente, de 5.000. Por el contrario, si se hubiera retrasado todavía más, unos 7 días más, el número de muertos habría subido hasta los 120.000.

Otra conclusión, derivada de este estudio y que Arenas ha compartido también en las redes sociales es que el comportamiento humano se adelantó al confinamiento domiciliario, adoptando medidas que todavía no se habían impuesto de manera oficial. En este sentido, el investigador subraya la importancia de los tempos en este contexto pandémico que vivimos desde hace ya más de un año.

Los resultados de la investigación resaltan un "retraso sustancial entre la exposición y la notificación en España". Sin ir más lejos, se detalla que este retraso dificulta una evaluación real de la situación epidemiológica y que, como consecuencia impide una respuesta eficaz a la gestión de la epidemia. Con el fin de justificarlo, ponen de ejemplo el primer cierre. "Nuestros resultados indican que las infecciones diarias ya habían llegado al máximo. De la misma manera, el 28 de marzo se cerró toda la actividad económica no esencial a pesar de aumentar el número de casos", se puede leer en el artículo. "No obstante, las infecciones diarias ya habían llegado a su punto máximo más de diez días antes en la mayoría de las comunidades autónomas".

Afectación de la primera ola del coronavirus en España

El 45,4% de los casos notificados de coronavirus requirieron hospitalización y un 4,5% ingresaron en las UCI, según un informe que publicó en Eurosurveillance un equipo del Centro Nacional de Epidemiología (CNE). Entre los casos notificados y confirmados de la primera ola, un 11,9% murieron. El 95% de los muertos tenían, como mínimo, alguna otra enfermedad, y cuanta más edad tenían los infectados, más aumentaba la letalidad. En los menores de 40 años, el porcentaje de mortalidad era menor del 0,5%. En el grupo de entre 70 y 79 años fue del 23% y en mayores de 80 años, del 62%.

El diciembre pasado, se conocieron más detalles de la incidencia de la primera ola en España. Sin ir más lejos, el Instituto Nacional de Estadística (INE), recogía que entre el mes de enero y mayo del 2020, murieron en España 45.684 personas por el coronavirus.

 

Imagen principal: interior de un tanatorio durante la crisis del coronavirus en Barcelona / Efe