Un 90 % de los médicos de Atención Primaria en España considera que las estrategias actuales para dejar de fumar son insuficientes, según el informe Tabaquismo y Atención Primaria en España: ¿por qué las estrategias actuales no bastan?, elaborado por la consultora LECA Solutions con un comité de seis especialistas y avalado por la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC) y la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN).

El estudio recoge la opinión de 250 médicos de toda España y revela que el 73 % de ellos cree que muchos pacientes fracasan al intentar abandonar el tabaco, mientras que el 66 % estima que cerca de la mitad de los fumadores ni siquiera se plantea dejarlo.

Jornada sobre tabaquismo
Jornada sobre tabaquismo

Falta de conocimiento sobre alternativas

Además, el 77 % opina que las terapias actuales no cubren las necesidades de la mayoría de los fumadores y el 89 % considera que los tratamientos disponibles requieren mejoras significativas. Asimismo, el 87 % admite no tener suficiente conocimiento sobre alternativas como vapeadores, tabaco calentado o parches de nicotina, y el 83 % cree que el colectivo médico no está adecuadamente informado sobre estrategias aplicadas en otros países con resultados positivos. La falta de tiempo en las consultas también se señala como un obstáculo para ofrecer un abordaje integral del tabaquismo.

El informe recuerda que el tabaquismo sigue siendo un grave problema de salud pública: España cuenta con más de ocho millones de fumadores y registra más de 22.000 muertes anuales por cáncer de pulmón, de las cuales cuatro de cada cinco están asociadas al tabaco. A pesar de la existencia de terapias farmacológicas y programas de cesación, las tasas de éxito a largo plazo no superan el 25 %, lo que genera preocupación en la comunidad médica por el impacto sanitario y económico.

Los autores destacan que, aunque España ha reducido la prevalencia de fumadores al 24 %, sigue entre las más altas de Europa, y subrayan la necesidad de actualizar la Ley Antitabaco y los protocolos clínicos incorporando evidencias recientes y experiencias internacionales, como el enfoque del Reino Unido, que combina cigarrillos electrónicos con seguimiento sanitario riguroso.

Por último, los especialistas señalan tres ejes clave para mejorar los resultados: reforzar el apoyo psicológico, crear grupos de terapia en Atención Primaria y fortalecer las unidades especializadas en tabaquismo. También hacen hincapié en la necesidad de una mayor formación de los médicos y de recursos públicos para implementar nuevas estrategias basadas en evidencia científica, orientadas a reducir el tabaquismo y sus consecuencias en la población. Como alerta Pablo González Ipiña, socio de LECA: “Si seguimos haciendo lo mismo, los resultados dentro de diez años apenas cambiarán; necesitamos innovar y aprender de los modelos que han funcionado en otros países”.