La división dentro del independentismo se puede percibir por todas partes, incluso en torno al Consell per la República. Muchos independentistas han criticado la misma existencia del órgano republicano por estar demasiado vinculado a Junts per Catalunya, por la falta de transversalidad y po no representar el conjunto del movimiento. Unas críticas que le han hecho bastante gracia al president Carles Puigdemont.

Puigdemont ha reconocido que estas voces discordantes con el Consell per la República "tienen razón". "Tiene sesgo partidista, no es transversal y no representa al conjunto del independentismo, que es mayoritario en el Parlament de Catalunya," ha admitido a Twitter. Sin embargo, un segundo: Puigdemont no estaba hablando del Consell per la República. "Estaban hablando de la mesa de diálogo, ¿no?", ha ironizado.

TUIT Carles Puigdemont Consell per la República

El president ha defendido así la existencia del órgano republicano y ha criticado al mismo tiempo la celebración de la polémica mesa de negociación porque tiene el mencionado sesgo partidista, sufre de falta de transversalidad y no representa la mayoría del movimiento independentista. De hecho, actualmente solo cuenta con el apoyo de ERC, ya que el president Pere Aragonès no aceptó la lista que propuso Junts. Por su parte, la CUP tampoco ha sido nunca muy partidaria de la negociación con el estado español.

El mensaje del president llega después de que el Consell per la República haya celebrado este fin de semana las elecciones a la Assemblea de Representants, en las cuales no han participado cargos destacados ni de ERC ni de la CUP. Puigdemont ha sido el cargo electo que ha conseguido más votos, seguido de la consellera Clara Ponsatí, los consellers Toni Comín y Lluís Puig y la presidenta del Parlament, Laura Borràs.

Los recelos de ERC

En la práctica, el Consell per la República es en un espacio de representación simbólica presidido por Puigdemont. Si bien no tiene competencias efectivas, es verdad que despierta los recelos de ERC. Los republicanos no quieren ningún contrapoder estratégico al president de la Generalitat, hasta el punto que el mismo Aragonès rechazó el sábado las "lecciones" de los que en el 2006 defendían un "Estatut recortado", en referencia al espacio político de la antigua CiU.

En cualquier caso, la creciente importancia de este organismo no se puede pasar por alto. El Consell per la República ha superado este otoño el hito de las 100.000 inscripciones, disparadas por la detención de Puigdemont en el Alguer y los hechos posteriores. Además, el éxito de la organización también es refleja en su expansión territorial, que hace poco más de una semana abrió un nuevo local en el distrito de Nou Barris (Barcelona).

 

Imagen principal: El president Carles Puigdemont / Efe