La reciente decisión del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, de impulsar la ocupación total de la Franja de Gaza, y en particular de la poblada Ciudad de Gaza, que este viernes tuvo la luz verde del gabinete de seguridad de Israel, ha indignado en el mundo, excepto a los Estados Unidos, que han adoptado una posición ambigua y se lavan las manos. El anuncio de los nuevos planes de Israel para perpetuar el conflicto extendiendo la ocupación militar, a pesar de las objeciones expresadas por los altos mandos -empezando por el jefe del Estado Mayor de las FDI, Eyal Zamir, y la indignación de la oposición y los familiares de los rehenes, ha provocado una oleada de críticas a escala internacional, empezando por la ONU, que ha convocado para este sábado una reunión de urgencia de su Consejo de Seguridad para analizar la situación. Pero nadie es capaz de pararle los pies al primer ministro, que está decidido a prolongar el conflicto, a pesar de poner el peligro la vida de los rehenes, de perpetuar el sufrimiento de una la población palestina que está al límite a pesar del llamamiento unánime internacional, la oposición política interna y el clamor de los ciudadanos y los familiares de los cautivos, que ven en la estrategia del primer ministro una táctica política para asegurar su supervivencia en el poder e incluso, evitar los procesos judiciales por corrupción que lo afectan directamente.
Decisión simbólica e inédita de Alemania
La mayoría de las portadas de este sábado, como la de El Periódico o La Vanguardia, enfocan sus informaciones en este "rechazo internacional" a los planes de Netanyahu; el diario Ara destaca que el primer ministro "ha impuesto sus planes al ejército", La Razón titula con la noticia de la aprobación del plan para controlar la Franja de Gaza, y El País pone el foco en la decisión de Alemania, que "prohíbe exportar armas en Israel que puedan usarse a Gaza", y destaca que "Naciones Unidas y la Unión Europea condenan la decisión de Benjamin Netanyahu de tomar el control total de la Franja". Una decisión cargada de simbolismo porque históricamente el gobierno alemán ha sido, desde la Segunda Guerra Mundial, uno de los aliados más próximos de Israel y raramente ha criticado o limitado sus acciones por el peso que todavía arrastra por el holocausto del nazismo, pero la situación en Gaza y las decisiones de Netanyahu están cuestionando este apoyo incondicional y el canciller alemán Friedrich Merz ha adoptado un tono marcadamente más crítico con las políticas del gobierno israelí. El diario de Prisa también destaca preferentemente en su portada otro tema en clave internacional. "Trump autoriza al ejército a luchar contra el narco en el extranjero", la medida más "agresiva" contra el tráfico de drogas que ha adoptado al presidente de los Estados Unidos, que también han subido la recompensa por la cabeza de Nicolás Maduro, a quién vinculan con el cártel de Sinaloa.
Air Europa i Jumilla
Quienes se desmarcan de Netanyahu y de Israel son el ABC y El Mundo, que prefieren apostar por la política española. "Air Europa presiona en la SEPI con un rescate que obliga a activar el escudo antiopas", titula el decano de la prensa conservadora española, reno relación a la oferta que Turkish Airlines ha hecho para comprar un paquete de acciones de la compañía de la familia Hidalgo que les permitiría saldar grande parte de su deuda millonaria con el Estado, pero que tendrá que pasar el filtro del Gobierno. La imagen-póster habitual de la portada de l'ABC está dedicada al conflicto de Jumilla, después de que el ayuntamiento, gobernado por el PP, pero con el apoyo decisivo del único concejal de Vox, aprobó una moción que veta la celebración de ritos y festividades musulmanas en espacios públicos municipales, especialmente en instalaciones deportivas. Vox presentó la propuesta original para prohibir fiestas islámicas en estos espacios, que el PP modificó, pero igualmente dio apoyo a la prohibición, aunque matizando que se trataba de limitar unas ciertas actividades públicas y no la libertad de culto en general. Abascal aprovecha la baza electoral de la inmigración: "Eso no es Al Andalus", titula el rotativo. El líder de Vox "celebra el veto a los ritos islámicos a Jumilla para 'proteger a los españoles' y tilde en el PP de cobarde y al PSOE de 'cómplice de la invasión", destaca en la portada que ilustra con una imagen de un hombre musulmán paseando por una calle de la localidad murciana. El Mundo, por su parte, también dedica el titular principal de su portada al tema de Jumilla con el mismo enfoque: "Vox extrema su discurso contra los inmigrantes para poner a prueba en el PP".
Susto en Córdoba
El incendio declarado en la Mezquita de Córdoba este viernes por la noche también tiene protagonismo gráfico en las portadas de El País, El Mundo y El Periódico, imágenes alarmantes del fuego saliente de la cubierta del edificio monumental patrimonio de la humanidad, pero que afortunadamente no causó daños personales y estuvo controlado.







