Las reuniones para intentar un acuerdo que permita poner en marcha el nuevo Parlament después de las elecciones del 14 de febrero se aceleran y toman forma a medida que se va agotando el plazo para la constitución de la nueva Cámara. Junts per Catalunya y la CUP han celebrado este mediodía un nuevo encuentro para intentar acercar posiciones. A través de un whatsapp, Junts ha explicado que la reunión ha servido para "seguir trabajando en un acuerdo de legislatura". Fuentes de las negociaciones aseguran que en las próximas horas se producirán nuevos contactos entre los partidos.

Desbordar el marco autonómico

Los cupaires han informado a través de una nota de prensa que las dos formaciones se han emplazado a trabajar por "una estrategia que permita desbordar el marco autonómico durante la próxima legislatura". Así mismo, se han comprometido a "establecer medidas para frenar el aumento de la extrema derecha en la instituciones y en la calle", con la consolidación del Pacte Nacional Antifeixista y una línea conjunta para hacer frente a Vox, que incluya a todas las formaciones.

El encuentro de hoy entre Junts y la CUP, el segundo después de que ya abrieron las conversaciones entre las dos formaciones el jueves pasado, se celebrar después de que tanto el partido de Carles Puigdemont como los cupaires se reunieron ayer con la delegación negociadora de los republicanos.

Como ya pasó ayer en la reunión con ERC​, también hoy la CUP ha puesto sobre la mesa el debate sobre el papel de la conselleria de Interior a raíz de las protestas contra el encarcelamiento de Pablo Hasél y "han trasladado la emergencia de frenar la represión contra las movilizaciones y establecer medidas que frenen esta dinámica y que permitan un giro de 180º en este ámbito".

Consenso estratégico

Desde Junts se ha insistido desde el día siguiente de las elecciones que la voluntad es conseguir un acuerdo de legislatura que garantice la estabilidad del nuevo ejecutivo. El objetivo es ahora concretar los términos en que se tiene que enmarcar la "consenso estratégico" durante la legislatura y la unidad de acción política de los socios tanto en el Parlament como en el Congreso de los diputados en aquello que afecta al procés independentista. Precisamente esta mañana se ha hecho evidente de nuevo las diferencias estratégicas entre republicanos y Junts en la cámara baja a raíz de las intervenciones de Gabriel Rufián y Míriam Nogueras.

La Mesa del Parlament -que se tendrá que votar con la constitución del nuevo hemiciclo, como muy tarde, el próximo 12 de marzo- se está perfilando como uno de los temas a concretar con mayor brevedad. Precisamente, la CUP ha convocado asambleas territoriales para abordar el papel que tendrá que asumir esta formación y que se decidirá en un consejo político este sábado. De hecho los cupaires no han descartado esta vez entrar a formar parte de la Mesa del Parlament, e incluso, presidirla.

Por su parte, el responsable del grupo parlamentario de ERC y miembro de la delegación republicana, Sergi Sabrià, aseguraba esta mañana a la SER que cuesta avanzar en los acuerdos pero la predisposición es positiva. Sabrià insistia en defender la via amplia, que han propuesto los republicanos a lo largo de la campaña, con la incorporacions de los comuns en el nuevo ejecutivo.

 

En la imagen principal, el hemiciclo del Parlamento vacío / Sergi Alcàzar