Desde que la Generalitat aprobara la normativa que recoge las indemnizaciones a ex-presos del franquismo, se han otorgado 22.512. Estas se conceden a las personas que las solicitan y que han sido privadas de libertad en establecimientos penitenciarios o disciplinarios del Estado español a consecuencia de la represión política ejercida durante la dictadura. Durante un acto este lunes el qué el Gobierno ha homenajeado a cuatro hombres que fueron encarcelados, y uno incluso ejecutado, durante el franquismo, el conseller de Justicia y Memoria Democrática, Ramon Espadaler, ha reconocido que todavía hay familiares de personas represaliadas que no conocen la posibilidad de estas indemnizaciones, y por eso se ha comprometido a hacer difusión.

La represión franquista en los Países Catalanes fue masiva y excepcionalmente cruel sobre los vencidos. El Arxiu Nacional de Catalunya hizo pública la lista de procesos y resoluciones dictadas por los tribunales militares (sumarísimos) en el 2017. La lista de la represión es aterradoramente larga: 65.590 personas fueron sometidas a consejos de guerra solo en Catalunya. Algunas pasaron muchos años en la prisión, se las marginó y estigmatizó y 3.358 tuvieron un destino mucho peor: fueron ejecutadas. El Parlament de Catalunya declaró nulos aquellos procesos el mismo año 2017.

El gobierno homenajea cuatro represaliados

El Govern ha homenajeado este lunes a cuatro hombres que fueron encarcelados, y uno incluso ejecutado, durante el franquismo. Se trata de Pere Culleré Ruciero, José Casas Cantons, José Serrano Mesa y Rosendo Barbosa, los familiares de los cuales -en el caso de Culleré ha estado él mismo- han recogido el diploma acreditativo que reconoce la privación de libertad sufrida en un acto presidido por el president de la Generalitat, Salvador Illa. El presidente ha agradecido el "coraje" de estos ciudadanos por oponerse al régimen franquista y contribuir a la democracia.

El único de los cuatro homenajeados vivo, Pere Culleré Ruciero, estuvo privado de libertad en la prisión de hombres Modelo de Barcelona durante 23 días, del 31 de octubre al 23 de noviembre de 1973, por un supuesto delito de reunión no pacífica.

Con respecto a José Casas Cantons, combatió durante la Guerra Civil a la 224 Brigada Mixta del Ejército Popular Republicano y, después de ser capturado y encarcelado por el ejército franquista, estuvo privado de libertad en el Batallón de Trabajadores número 252 de Palencia, de enero de 1939 a junio de 1940.

El tercer homenajeado ha sido José Serrano Mesa, quien fue ejecutado por un supuesto delito de rebelión militar. Previamente, había sido durante más de tres años, entre el 2 de abril de 1941 y el 26 de mayo de 1944, privado de libertad a las prisiones de Baza (Granada), Úbeda y Jaén.

Por último, Rosendo Barbosa Cruset estuvo en la Prisión Provincial de Girona, en la de Lleida, en la Cel·lular de Barcelona y en la provincial de Santander durante casi siete años, entre el 31 de mayo de 1939 y el 4 de febrero de 1946, por un supuesto delito de adhesión a la rebelión militar.

Reforma de la ley de memoria democrática

Durante su intervención, Illa ha explicado que se quiere "actualizar" la ley de memoria democrática y ha esperado que el "máximo" de formaciones le den costado y pueda sacar adelante con el máximo consenso posible. En una línea similar, el conseller de Justicia y Memoria Democrática, Ramon Espadaler, ha añadido que la norma habla de "verdad, justicia y reparación" y que busca el objetivo "del nunca más".

El conseller ha expresado la preocupación del ejecutivo por el hecho de que las generaciones más jóvenes relativicen el valor de la democracia, como muestran encuestas recientes. "No nos lo podemos permitir", ha manifestado. Por eso, Espadaler ha dicho que las generaciones más jóvenes "tienen que conocer el sufrimiento y el precio que se ha pagado por la democracia". Por su parte, el presidente de la Associació Catalana d'Expresos Polítics del franquisme, Carles Vallejo, ha criticado la "involución y banalización del fascismo", especialmente entre una parte de los jóvenes, y ha dicho que se tiene que invertir "todo lo que sea necesario en educación, cultura y memoria democrática".

"Grito de alerta ante" la amenaza de derechos

En su intervención durante el acto de homenaje, el president de la Generalitat, Salvador Illa, ha querido dar un "grito de alerta" ante la amenaza que se cierne, ha dicho, sobre derechos conquistados. Así, ha afirmado que el progreso de la humanidad, cuando se habla de derechos, es cómo nadar a contracorriente: "si dejas de nadar, la corriente se te vuelve a llevar". Por eso, ha pedido no "banalizar" las situaciones en que no se respetan estos derechos y ha hecho un llamamiento a actuar rápido.