Rendir cuentas. Los independentistas del Congreso de los Diputados han pedido las comparecencias tanto del presidente español, Pedro Sánchez, como del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, por la masacre de Melilla. Los catalanes de ERC, Junts y CUP han presentado este lunes a la cámara esta petición, junto con los gallegos del BNG, los vascos de EH Bildu, los valencianos de Compromís y los madrileños de Más País. Todas las formaciones han señalado a Sánchez y Grande-Marlaska como los "responsables" de la tragedia de este fin de semana en Melilla, donde al menos 37 personas fueron asesinadas y décimas víctimas de una grave actuación policial que causó decenas de heridos.

Los grupos políticos también han manifestado que las muertes son "consecuencia de las políticas migratorias de la Unión Europea y el nuevo acuerdo entre el gobierno de España y el gobierno de Marruecos". Con la petición para que comparezcan el presidente español y el ministro del interior, los partidos se oponen a las declaraciones que fue Sánchez el viernes pasado. Unas declaraciones donde el jefe del ejecutivo estatal cerraba filas con la actuación del ejército marroquí. Sea como sea, quieren explicaciones de Sánchez i Grande-Marlaska con relación a las vulneraciones de derechos humanos por parte de las autoridades migratorias del pasado 24 de junio en la frontera entre Nador y Melilla.

 

Por otra parte, los socios de Sánchez en el Gobierno se han desmarcado de su discurso. De hecho, Podemos ha registrado este mismo lunes una proposición no de ley con la cual exigen que se abra una investigación independiente de la "tragedia humana" en la valla de Melilla. También ha reclamado "derivar las responsabilidades políticas y penales que correspondan en colaboración con las delegaciones diplomáticas de la Unión Europea presentes en territorio marroquí", a la vez que quieren que la iniciativa parlamentaria garantice "una atención sanitaria adecuada" a los centenares de heridos que resultaron de los incidentes registrados el viernes.

La relación entre PSOE y Unidas Podemos no es buena, como mínimo en esta cuestión. Después de las críticas de Yolanda Díaz, este lunes el Gobierno ha silenciado a Irene Montero. "Si le parece bien a la ministra de Igualdad, responderé todas las cuestiones relacionadas con la valla de Melilla", ha advertido a la portavoz, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa después celebrada después de la reunión del Consejo de Ministros. Los periodistas han insistido en conocer la opinión de Montero, pero Rodríguez también ha insistido en ser ella quien ha respondido todas las preguntas relacionadas con el tema. La ministra de Igualdad ha aceptado con resignación la autoridad de la portavoz y no ha hecho ninguna referencia al desastre de la frontera con Nador.