El 14 de febrero del 2021, los catalanes escogieron a sus 135 representantes en el Parlament en unas elecciones celebradas en pandemia y con una baja participación. Ahora bien, los 135 nombres que surgieron aquel día de las urnas no son los mismos que participaron del último pleno del Parlament de esta legislatura, el pasado 13 de marzo, cuando la cámara catalana tumbó los presupuestos ara el 2024 y horas más tarde el president Pere Aragonès convocó elecciones para el 12 de mayo. De hecho, entre las personas que la ciudadanía del país escogió para ser diputados, hasta 37 no han terminado la legislatura. Esta cifra representa un poco más 25% del total de los escaños que hay en el Parlament, aunque la cifra varía mucho dependiendo de cada partido. Junts y ERC son las formaciones que han perdido más diputados escogidos el 14-F mientras que Vox solo ha tenido una baja, la de Antonio Gallego, que sigue siendo diputado todo y que no adscrito.

De diputados a cargos de Govern

ERC y Junts son los partidos con más relevos dentro de su grupo parlamentario por un motivo muy simple: al principio de la legislatura estas dos formaciones llegaron a un acuerdo para formar Govern y muchos de los diputados escogidos por la ciudadanía dejaron el acta para centrarse en su nuevo cargo. Así, Laura Vilagrà, Roger Torrent, Teresa Jordà, Jordi Puigneró, Lourdes Ciuró y Gemma Geis dejaron su escaño ya en los primeros compases de legislatura para formar parte del Ejecutivo de Aragonès, y Meritxell Serret hizo lo mismo cuando asumió el cargo de consellera de Acción Exterior tras la ruptura Govern de coalición. En cambio, Juli Fernández, que también era diputado y fue el sustituto de Puigneró al frente de Territori no siguió los mismos pasos y cuando fue relevado por Ester Capellà en el Consell Executiu volvió a ocupar el escaño que le correspondía.

Pere Aragonès lleno investidura hemiciclo Parlamento Efe
Algunos de los diputados que participaron en la sesión de investidura de Pere Aragonès como president de la Generalitat acabaron dejando o perdiendo el acta en los meses siguientes / Foto: Efe

Durante los primeros cuatro meses de la legislatura se produjeron hasta 16 bajas, una cifra que se ha acabado duplicando en los años siguientes. Aparte de consellers, otros diputados fueron nombrados con cargos por parte del Govern y decidieron dejar el acta de diputado. Sergi Sabrià pasó a ser director de la Oficina de Estrategia y Comunicación del president del Govern, o Anna Caula, que era vicepresidenta de la Mesa, fue designada secretariageneral de Esports. En el caso de Junts, Meritxell Budó, Damià Calvet y Eusebi Campdepedrós, que iban en lugares destacados de la lista, pasaron a trabajar por los departamentos de Salut y Justícia y como director de Ports. Más adelante, con el cambio de Govern, Calvet perdió el cargo y lo sustituyó el republicano Lluís Salvadó, que también dejó el acta de diputado.

Por su parte, algunos de los diputados electos también fueron escogidos por sus respectivos partidos como delegados del Govern. Es el caso de Ester Capella, que se marchó a Madrid y después volvió al Parlament como consellera de Territori (antes había sido elegida concejala en Barcelona pero nunca recogió el acta en el Ayuntamiento), y de Teresa Pallarès, en Tarragona. Con la salida de Junts del Govern, ERC situó a Albert Salvadó en este cargo y el ebrense ha sido escogido ahora número 2 del partido a las listas por Tarragona para el 12-M. Por parte de Junts, Ferran Roquer dejó el escaño para centrarse en su trabajo a la Sindicatura de Cuentas.

Puigdemont, escogido pero sin llegar a tener el acta

Un caso aparte es el del president Carles Puigdemont, que aunque iba de número 1 a las listas de Junts por Barcelona, tenía un papel simbólico por delante de Laura Borràs. Así, a pesar de ser escogido por los catalanes como diputado, nunca llegó a recoger el acta. Un mes más tarde que se celebraran las elecciones renunció a hacerlo, para mantener su escaño en el Parlament Europeo, ya que los dos cargos como diputados son incompatibles. Por eso mismo, en el anuncio de su candidatura en Elna, Puigdemont anunció que renunciaba a presentarse como candidato a las europeas que se tienen que celebrar el mes de junio, pocas semanas después de las catalanas. El siguiente a la lista de Junts era Josep Costa, pero el ibicenco tampoco recogió el acta y entró en el Parlament Glòria Freixa.

Motivos personales o laborales

Tras la formación de Govern y con las bajas del principio de la legislatura, estas se siguieron produciendo en las filas tanto de Junts como de Esquerra. Así, el exconseller republicano Chakir el Homrani y la atleta Núria Picas abandonaron el Parlament por motivos personales y Ernest Maragall también lo hizo para centrarse en la carrera electoral por Barcelona. Este 2024 es el encargado de cerrar las listas del partido, como Xavier Trias en el caso de Junts y Ada Colau la de los comunes. En el caso de Junts, Elsa Artadi decidió dejar el acta como diputada, y también renunciar a encabezar la candidatura del partido por Barcelona, por motivos de salud mental. Jaume Alonso-Cuevillas hizo lo propio poco antes de que se convocaran elecciones para centrarse en su trabajo como abogado. La presidenta del partido, Laura Borràs, protagonizó la baja más polémica de la legislatura, ya que la mesa le retiró el escaño después de prácticamente un año como presidenta suspendida del Parlament. También se marchó para concentrarse en su tarea como alcalde el diputado Juan Carlos García, diputado por Lleida, hecho que permitió la entrada a Jeannine Abella, que encabeza la candidatura por esta demarcación para el 12-M, o Marta Madernas, ahora diputada en el Congreso.

Diputados por sorpresa

En total 12 de los 33 diputados que los electores de Esquerra escogieron el 14-F, entre los cuales se incluye el difunto Antoni Flores, y 13 del 32 de Junts, han sido renovados, cifra que representa poco más de un tercio de cada uno de los grupos parlamentarios. Esto ha provocado que candidatos que inicialmente no fueron escogidos en las elecciones del 14 de febrero hayan acabado teniendo un escaño esta misma legislatura. Por ejemplo, Adrià Guevara, que iba en la 27.ª posición de las listas por Barcelona se convirtió en diputado dos años más tarde, en febrero del 2023, en sustitución de Margall. Aunque por encima había dos candidatos más a la lista, estos ya tenían un cargo del Govern. Si los republicanos consiguieran este 12 de mayo los mismos resultados que el 14-F en la demarcación de Barcelona,19 diputados, podría llegar a entrar el 27 de la lista, si se dan las mismas bajas que esta legislatura. En Girona, esta situación todavía es más evidente: a pesar de sacar a cuatro diputados, el 8 de la lista, Jaume Butinyà ha acabado teniendo escaño: Jordano, Sabrià y Caula renunciaron al acta y Laia Cañigueral (este año cabeza de lista), que ocupaba el quinto lugar, ya había sido designada delegada del Govern en Girona.

Del Parlament a los ayuntamientos

Si un tercio de los diputados de Junts y ERC han sido renovados a medida que ha avanzado la legislatura hay tres partidos que están en la misma situación: la CUP, los comunes y el PP. Tres de nueve anticapitalistas no han completado su mandato: Eulàlia Reguant y Dolors Sabater por decisión propia y Pau Juvillà a raíz de su inhabilitación. Dos de los diputados de los comunes abandonaron el Parlament para dedicarse a la política municipal (Jordi Jordan, alcalde de Tortosa y Lucas Ferro, concejal en Molins de Rei), mientras que Marc Parés, lo hizo alegando motivos personales. El PP también ha renovado a un tercio de sus diputados, ya que solo consiguió tres el 14-F y Eva Parera terminó para concentrarse en su plataforma, Valents, que acabó fracasando estrepitosamente en las municipales.

La otra cara de la moneda son PSC, Vox y Ciutadans. Los socialistas, a pesar de tener los mismos diputados que ERC, solo han hecho tres cambios entre sus representantes al Parlament. Uno fue significativo, ya que se marchó la portavoz Eva Granados al Senado, mientras que los otros dos se produjeron tras las elecciones municipales: Rubén Viñuales y José Luís Ruiz abandonaron el Parlament para ejercer plenamente como alcaldes de Tarragona y Vilanova i la Geltrú. Está por ver si finalmente los socialistas vuelven a formar parte de un Govern de la Generalitat como podría pasar después del 12 de mayo (por primera vez desde el 2010), si mantendrían esta misma estabilidad de la cual han disfrutado como principal grupo de la oposición, o si, en cambio, harían el mismo proceso que ERC y Junts a principios de legislatura. En su caso, no ha habido ningún diputado que haya dejado el trabajo por motivos personales.

Los mismos 11 diputados de Vox que el 14-F

Vox entró con fuerza en el Parlament en el 2021 con 11 diputados de ultraderecha y todos se han mantenido en la cámara catalana desde el primero al último día de la legislatura. Uno de ellos, Antonio Gallego, pasó a ser no adscrito (como Cristina Casol, ex de Junts) aunque durante esta época no ha manifestado opiniones demasiado diferentes de las que tenían sus compañeros. La única baja de entre los seis diputados que consiguió Ciudadanos (las encuestas auguran que los perderá todos) fue muy dolorosa: Nacho Martín Blanco, su portavoz anunció que dejaba el Parlament y pocos días más tarde se descubrió que sería el candidato del PP a las elecciones españolas del 23 de junio.