Aunque es uno de los alimentos más básicos y versátiles de nuestra cocina, la patata sigue generando muchas dudas cuando llega el momento de conservarla correctamente. No es raro encontrarlas brotadas, blandas o con un sabor extraño apenas unos días después de comprarlas, algo que suele llevarnos a pensar que “han salido malas”. Sin embargo, en realidad el problema casi nunca está en el producto, sino en cómo lo guardamos en casa. En un vídeo que se ha hecho viral en Facebook, el popular cocinero Jordi Cruz explica de forma muy clara por qué las patatas se estropean antes de tiempo y cuál es el método correcto para alargar su vida útil sin complicaciones ni trucos extraños.

Cómo conservar las patatas para que duren mucho tiempo

Según el chef, uno de los errores más habituales es dejarlas en un lugar cálido y con mucha luz, como encimeras, estanterías abiertas o cerca de una ventana. En estas condiciones, la patata interpreta que ha llegado el momento de “despertar” y empezar a brotar. Ese proceso acelera su maduración, hace que pierda firmeza y provoca que se estropee mucho antes de lo esperado. Además, la luz favorece la aparición de tonos verdosos en la piel, una señal clara de que el tubérculo ya no está en su mejor momento y que conviene extremar la precaución antes de consumirlo.

Cómo conservar patatas / Foto: Unsplash
Cómo conservar patatas / Foto: Unsplash

Otro hábito muy extendido, pero igual de incorrecto, es guardar las patatas en la nevera. Jordi Cruz lo desaconseja de forma tajante. El frío intenso transforma los almidones naturales de la patata en azúcares, lo que provoca que su textura se vuelva más dura y su sabor cambie de manera notable. Esto no solo afecta al gusto final, sino también al resultado de las recetas, ya que una patata refrigerada se comporta de forma distinta al cocerla, freírla o asarla. En otras palabras, el frigorífico no es el lugar adecuado, aunque a simple vista pueda parecer una opción lógica.

La solución, explica el cocinero, es mucho más sencilla de lo que solemos pensar. Las patatas solo necesitan un entorno fresco y seco para conservarse correctamente durante semanas. Un lugar sin humedad, protegido de la luz directa y con una temperatura estable es suficiente para mantenerlas en buen estado. No requieren recipientes especiales ni tratamientos previos: basta con dejarlas respirar y no someterlas a cambios bruscos de temperatura. Por eso, despensas, armarios ventilados o cajas de madera en zonas frescas de la casa suelen ser opciones ideales.

Las patatas solo necesitan un entorno fresco y seco

Este consejo conecta con una idea muy clara que Jordi Cruz repite a menudo: muchos alimentos se estropean antes por desconocimiento que por mala calidad. En el caso de la patata, respetar sus necesidades naturales es clave para aprovecharla al máximo, reducir el desperdicio y mejorar el resultado en la cocina. Guardarlas bien no solo significa que duren más tiempo, sino también que conserven su sabor auténtico y su textura perfecta, algo esencial en un ingrediente tan presente en nuestro día a día.