En el mundo del deporte, las modas cambian rápido, pero algunas llegan para quedarse. Y la última tendencia que está conquistando a los runners y ciclistas profesionales no es lo que imaginas. Nada de barritas energéticas de laboratorio ni mezclas complicadas de suplementos: lo que se está poniendo de moda como desayuno o almuerzo pre-entreno son, ni más ni menos, las papillas para bebés. Así lo cuenta Sergi Mas (@bysergimas) en uno de sus vídeos de Instagram que se ha hecho viral. Lo que al principio puede sonar como una broma o una rareza, empieza a tener bastante sentido si miramos la etiqueta nutricional y analizamos su composición.
El almuerzo de moda entre runners
Estas papillas infantiles, que cualquiera puede encontrar en cualquier supermercado, están pensadas originalmente para alimentar a bebés, por lo que su formulación busca ser nutritiva, equilibrada y muy fácil de digerir. Si nos fijamos bien, una ración de 18 gramos de papilla contiene aproximadamente 16 gramos de hidratos de carbono, que es justo el tipo de energía rápida que muchos deportistas buscan antes de entrenar. Además, contiene muy poca grasa saturada y azúcares, y cerca de un gramo de proteína por ración. No es una bomba de calorías, pero sí un chute de energía estable y accesible, ideal para quienes salen a correr o montan en bici por la mañana y no quieren un desayuno pesado.

Uno de los grandes atractivos de esta alternativa es su textura suave y digestión rápida, lo que la convierte en un aliado interesante para evitar molestias gastrointestinales durante el ejercicio. Además, preparar una papilla no tiene complicación alguna: se mezcla el polvo con un poco de agua o leche, y en cuestión de segundos está lista. No se trata de tomarla directamente del bote como un bebé, sino de aprovechar su valor nutricional y adaptarlo a las necesidades de un adulto activo.
Es cierto que a muchos les puede sonar raro o incluso ridículo preparar una papilla antes de salir a entrenar, pero si los resultados acompañan, el prejuicio desaparece rápido. Y no hablamos solo de deportistas amateurs: hay ciclistas profesionales y corredores de élite que han incorporado estas papillas en su rutina por su sencillez y eficacia.
Puede que no sea el almuerzo más glamuroso, pero está claro que cuando se trata de rendimiento, la practicidad manda. Así que si estás buscando algo nuevo, barato y fácil para tu próxima salida deportiva… tal vez deberías mirar en el pasillo de los bebés.