Tal día como hoy del año 1797, hace 228 años, se reunía por última vez en la historia el Gran Consejo, el organismo de gobierno de la milenaria República de Venecia. Unas semanas antes (marzo, 1797), las tropas de la República francesa, comandadas por el general Napoleón Bonaparte, habían invadido —prácticamente sin resistencia— el territorio del Stato di Terraferma (la parte continental del estado veneciano, formado por las actuales regiones italianas del Véneto, Trentino y Friuli). El general Bonaparte (todavía faltaban siete años para que perpetrara el golpe de Estado que lo convertiría en emperador), forzó la disolución del gobierno veneciano y, cuatro días más tarde (16 de mayo), proclamó la anexión del territorio conquistado a Francia.
La ciudad de Venecia fue fundada en 471; pero el estado veneciano —que tendría un gran protagonismo en el concierto medieval europeo— fue creado el 697. Por lo tanto, cuando el general Bonaparte forzó la desaparición de la República de Venecia, se cumplía el 1.100 aniversario de su fundación. No obstante, la investigación historiográfica revela que, cuando se produjeron estos acontecimientos, la República veneciana estaba inmersa en una profunda crisis social, política y económica que se había iniciado tres siglos antes con la caída de Constantinopla en manos de los otomanos y que representaría un tapón en las comunicaciones con Extremo Oriente (1453), y con la apertura de las rutas atlánticas hacia América y Asia (1492-1497).
El 17 de octubre de 1797, los generales Bonaparte —del ejército francés— y Von Coblenz —del ejército austríaco—, firmaron el Tratado de Campo Formio y se repartieron los territorios venecianos del Stato di Terraferma —para Austria— y del Stato di Mare (las islas de la costa Adriática) —para Francia. Cuando finalizaron las Guerras Napoleónicas, Austria se presentó a las conversaciones de paz (Viena, 1815) como potencia ganadora. En aquel congreso vería consolidado su dominio sobre el nordeste de la península italiana e impediría la recuperación de la milenaria República veneciana, que jamás sería restaurada. En 1847 pasó a dominio del ducado de independiente de Piamonte, que lideraba el proceso de unificación de Italia.