El capitán de la selección española de fútbol masculina, Sergio Ramos, reconoció que vive de manera "especial" la visita a Cádiz este viernes para jugar contra Malta, donde recibirá el homenaje como jugador con más partidos con España, mientras que dudó de que sea "momento idóneo" para jugar en Barcelona como deseó su seleccionador, con un Clásico suspendido y con el Real Madrid como "perjudicado".

"El momento idóneo quizá no sea, ya que se ha suspendido un Clásico por motivo obvios que no están a nuestro alcance. Esperemos que se solucione cuanto antes, que nuestro país tenga un equilibrio en todos los sentidos y en todas las autonomías. Habrá gente que querrá ver a la selección ahí, será un placer jugar en Barcelona", afirmó.

De hecho, el capitán de la selección mostró el descontento de su equipo, el Real Madrid, por la designación del Clásico para el 18 de diciembre, ya que el cuadro blanco tendrá un día menos de descanso. "Al final los únicos perjudicados aquí somos nosotros. Es una pena que el partido no se jugase en la fecha establecida. Si los dos equipos hubiéramos jugado el mismo sábado no había beneficio para ninguno. En este caso somos nosotros los perjudicados, hay un margen para modificarlo pero iremos con la mentalidad de querer", apuntó.

Ramos se refirió a otro tema candente como que la Federación lleve la Supercopa de España a Arabia Saudí. "Nosotros no somos las personas que decidimos este tipo de cosas. La Federación ya ha pactado con ellos y los jugadores no podemos hacer nada al respecto. Todo lo que sea intentar cambiar que las mujeres puedan ir a los estadios, aprovechar el deporte para unir, hay que intentar buscar ese equilibrio", afirmó.