Aunque desde el Barça intenten transmitir tranquilidad y seguridad, la realidad es que existe una enorme preocupación. Porque Joan Laporta y Deco no encuentran la manera de obtener los ingresos que necesitan, para poder equilibrar las finanzas, y reducir la escala salarial. Como todo el mundo sabe, la idea era prescindir de las piezas que no entran en los planes de Hans-Dieter Flick, como Iñaki Peña, Héctor Fort, Oriol Romeu o Pau Víctor.
Pero tan solo el último de ellos ha recibido ofertas formales, y el resto pueden salir a coste cero. Por otro lado, Marc-André ter Stegen y Ronald Araújo se han negado a decir adiós, y esto supone un contratiempo muy importante en el Camp Nou, ya que confiaban en poder deshacerse de sus elevados sueldos. Y si las cosas no se solucionan pronto, deberán de estudiar la idea de realizar otros sacrificios, aunque sean dolorosos, como el de Marc Casadó.
Es inevitable que el conjunto azulgrana tenga que realizar una venta millonaria durante este periodo de traspasos, y ya han aparecido muchos candidatos. Por ejemplo, se ha llegado a especular con la venta de Fermín López, quien no deja de recibir nuevas ofertas. Pero la realidad es que, en estos momentos, el principal candidato a decir adiós es el ‘17’, por el cual existe también mucho interés, y que no tiene garantizada la titularidad en absoluto.
Desde que perdió el puesto en manos de Frenkie de Jong, no ha sido capaz de recuperar su mejor versión, y se ha tenido que conformar con la suplencia. Y si en el Barça acaban de concretar la renovación del neerlandés, como están intentando Laporta y Deco, se le cerrarían por completo las puertas de la titularidad. Sin olvidar que en esa demarcación, Flick también cuenta con Marc Bernal, quien ya está en la recta final de su recuperación, y muy pronto podría reaparecer.

Casadó, por lo tanto, es un futbolista prescindible, y que dejaría una importante cantidad de dinero en las arcas. Así que no se puede descartar su venta en absoluto.
Casadó, valorado en un mínimo de 40 millones de euros
Han aparecido pretendientes de primer nivel como el Manchester United, el Atlético de Madrid, el Chelsea, el Bayer Leverkusen, el Liverpool o la Juventus de Turín, que tendrían un firme interés en la incorporación del centrocampista nacido en el año 2003.
Sin embargo, el Barça no está dispuesto a regalarlo, y como mínimo exigirán unos 40 millones de euros para que pueda salir del proyecto liderado por Flick.