Cristiano Ronaldo no acepta un acuerdo con la Agencia Tributaria para liquidar los cuatro delitos fiscales. Según revela El Mundo, el futbolista del Real Madrid habría presentado un escrito a la jueza Mónica Gómez Ferrer donde asegura que las acusaciones de fraude fiscal que se le atribuyen son "sin ningún fundamento".

De esta manera, Cristiano y su equipo pretenden justificar, a partir de la desacreditación de los documentos filtrados por Football Leaks y que publicó la red europea de medios EIC donde se aseguraba un fraude de 14,7 millones de euros, los delitos fiscales entre los años 2011 y el 2014. El escrito del portugués llega después de su declaración ante la jueza el pasado 31 de julio. En el documento enviado se explica también que la acusación es "inconsistente" y que se encuentra vinculada "en la utilización arbitraria de criterios contrarios al Derecho Tributario".

A todo eso, el equipo de Ronaldo añade que el argumento de la acusación "es fácilmente desmontable por un observador objetivo". Y con esta explicación reduce la cuestión del fraude en una "discrepancia de criterio". Tal como pasó con los ejercicios del 2009 y del 2010 del futbolista portugués, ahora pide que los ejercicios del 2011, 2012, 2013 y 2014, los principales años investigados a estas alturas, se den también por prescritos.