Lo indica un reciente estudio elaborado por expertos en Enfermería y Fisioterapia de la UdL: las sesiones de fisioterapia online que muchas personas con discapacidades o enfermedades neurodegenerativas tuvieron que seguir durante los meses del confinamiento pandémico no funcionaron todo lo bien que se esperaba.

Los residentes de los centros geriátricos, también perjudicados
Tanto fue así que el estudio ha constatado como, incluso, se dieron casos de personas que eran autónomas antes del confinamiento y acabaron siendo dependientes después del mismo y tras recibir únicamente y como toda atención fisioterápica las citadas sesiones telemáticas. El estudio se ha realizado mediante entrevistas a 44 profesionales de la fisioterapia que trabajan en Catalunya y Galicia de entre 24 y 44 años.
Efectos devastadores
Con el estudio, se constata que los sistemas de asistencia sanitaria telemática, si bien son útiles para determinados casos de patologías leves, no funcionan como debieran en casos en los que el enfermo precisa de una atención específica. En el caso de los usuarios geriátricos, a los efectos emocionales que la soledad derivada del confinamiento generó, hay que añadirle pérdidas de funcionalidad y calidad de vida y, también una pe´rdida de masa muscular y fuerza más aceleradas. Para los pacientes geriátricos con patologías crónicas, concluye el estudio, el efecto fue “devastador”. Los usuarios de la fisioterapia pediátrica también experimentaron un empeoramiento de su salud. Por todo ello, los responsables del estudio reivindican el valor de las terapias manuales frente a una atención telemática que es positiva pero no suficiente.