Las altas temperaturas de este verano en Catalunya, con cifras desorbitadas y de récord, destacando las de finales de junio y principios de julio, han dejado toda una serie de víctimas mortales en el país atribuibles al calor: hasta 670, según el sistema de monitorización de la mortalidad diaria (MoMo), que depende del Centro Nacional de Epidemiología del Instituto Carlos III. Estas cifras triplican las que, según el mismo organismo, se dieron el año pasado en el periodo analizado, entre el 16 de mayo y el 30 de septiembre. El mes más mortífero ha sido agosto, con 361 víctimas, 250 en julio, 55 en agosto y 4 en septiembre. Estos números no solo significa multiplicar por tres las muertes de 2024, sino que también son más elevados que los que se registraron en 2022, el año más cálido en Catalunya desde que hay registros: 10 de los 12 meses de ese año fueron cálidos o muy cálidos y la sequía que sufría el país se empezaba a agravar. Aquel verano, murieron 582 personas por causas atribuibles al calor, casi un centenar menos que este año.
Este aumento no solo se observa en Catalunya, sino que, en todo el Estado, las defunciones atribuidas a esta causa también han crecido, en este caso de un 88%, con 3.832 casos. En cuanto a las muertes de forma directa por golpes de calor, en todo el Estado han sido 25. Desde el Ministerio de Sanidad se ha publicado el informe final del Plan de Calor estatal, según el cual se han registrado 870 episodios de calor de alto riesgo en todo el Estado, en comparación con los 501 del período estival de 2024.
Hasta 1.153 muertes asociadas con el calor en 2024, según otro estudio
Según un estudio hecho público por el Instituto Global de Barcelona, el tercero consecutivo, el calor del verano de 2024 se asocia con 1.153 muertes en Cataluña entre el 1 de junio y el 30 de septiembre de ese año. A pesar de la elevada cifra, esta se encuentra por debajo de las 1.409 de 2023 y las 2.269 de 2022. El estudio también señala que en la demarcación de Barcelona es donde más muertes asociadas al calor hubo: 865, mientras que fueron 114 en Girona, 94 en Tarragona y 80 en Lleida. En cambio, si observamos la tasa de mortalidad por millón de personas, la más alta se registró en Lleida (179), seguida de Barcelona (149), Girona (141) y Tarragona (111). En el estado español fueron 6.743 las muertes ocurridas por causas asociadas al calor, mientras que en el conjunto de Europa fueron 62.775, un 23,6% más que las aproximadamente 50.800 muertes estimadas para el verano de 2023, pero un 8,1% menos que las cerca de 67.900 de las de 2022. En los tres años analizados, el calor fue más mortal entre las personas mayores, como sería esperable, y también tiene más incidencia sobre las mujeres que sobre los hombres.