El Ayuntamiento de Barcelona impulsa un plan de choque para favorecer la convivencia en el barrio de Sant Antoni con un refuerzo de la seguridad y la limpieza y también el ámbito social. El plan, presentado este lunes por el concejal del distrito del Eixample, Jordi Valls, tiene como objetivo buscar soluciones inmediatas y de impacto para evitar dinámicas incívicas y problemas de convivencia. Al lado de representantes vecinales, el concejal del Eixample, Jordi Valls, ha señalado que lo que se quiere es "construir comunidad" y mejorar la convivencia, un reto que ha admitido que "no será fácil" e implicará trabajo a "largo plazo". La estrategia de intervención tendrá especial incidencia en los entornos del mercado, la supermanzana y la ronda Sant Antoni. De hecho, en la zona de la supermanzana, está prevista la retirada y reubicación de ciertos elementos del mobiliario urbano táctico de la supermanzana, coincidiendo con el inicio de las obras que empiezan esta semana en la red freática de la calle del Conde Borrell.
En declaraciones a los medios de comunicación, Valls ha destacado que Sant Antoni es "un barrio vivo", "potente" y "fantástico", si bien ha admitido que hay elementos que hay que mejorar, sin caer en provocar que se tenga "una visión determinada" del barrio. Con respecto a problemas de convivencia en el espacio público, se trabajará para abordar dinámicas identificadas por el Servicio de Gestión de Conflictos, con foco principal en la ronda Sant Antoni, con actividad detectada de venta ambulante, el mercado de vendedores nocturno delante de las Escoles Pies, y las quejas por molestias relacionadas con actividades ruidosas. Asimismo, ya se han retirado algunos carros de chatarra abandonados que estaban atados a mobiliario urbano. Sobre el urbanismo táctico, Valls ha reconocido que funciona durante "un periodo determinado", pero ha defendido convertirlo en definitivo a partir de abril del próximo año porque ya hace cuatro años que existe.
Plan de choque con refuerzo policial y de limpieza
Uno de los ejes de trabajo del plan de choque es el refuerzo del dispositivo de policía de barrio de la Guardia Urbana, que incrementará el patrullaje de los agentes a pie, en coordinación con los Mossos d'Esquadra. Además, habrá una interlocución directa y periódica entre los cuerpos policiales y las entidades para identificar problemáticas concretas y acotadas en el tiempo y el espacio donde focalizar la atención para poder abordarlas y hacer su seguimiento. Por otra parte, la inspectora del Eixample, Begoña Garcia, ha anunciado que está programada una campaña de inspección en locales de segunda mano, con coordinación entre cuerpos policiales e Inspección de Trabajo, para detectar posible venta de material reciclado. Con respecto a la limpieza, se ha anunciado un nuevo equipo que repasará, mañana y tarde, los alrededores de los contenedores para evitar desbordamiento y acumulación de basura, dando repasos entre cuatro y seis veces al día.
Abordaje del sinhogarismo
Con respecto al ámbito social, el Ayuntamiento ha apreciado un incremento del uso intensivo del espacio durante el verano por parte de personas sin hogar. Desde el Servei d'Atenció Social al Sensellarisme a l'Espai Públic (SASSEP) se seguirá con el trabajo de contacto y vinculación con las personas que pernoctan en la zona. Los profesionales educadores de la Agència de Salut Pública hacen rutas diarias para contactar con personas consumidoras de drogas y trabajar con ellas proponiéndoles que vayan a consumir en los espacios de reducción de daños de alguno de los Centres d'Atenció i Seguiment (CAS) de drogodependencias. En coordinación con el Consorci Sanitari de Barcelona, se prevé abordar de manera conjunta el consumo problemático de sustancias, mediante la colaboración de los profesionales de los CAS y los dispositivos asistenciales ubicados en el CAP Manso.
Retirada de mobiliario de la supermanzana
Durante esta semana empezarán las obras de la red de agua freática, unos trabajos visibles en la parte táctica de la supermanzana de Sant Antoni que durarán unos dos meses. La actuación obligará a retirar todo el mobiliario situado en el lado Llobregat de Comte Borrell, desde Manso hasta Aldana. El Ayuntamiento quiere aprovechar las actuaciones de las obras para mover, reubicar o retirar entre un 20% y un 30% de los cerca de 600 elementos que hay actualmente en la supermanzana táctica. Tamara Jiménez, jefa del Departamento de Obras y Mantenimiento del Distrito, ha asegurado que el esquema actual no cambiará y que se eliminará mobiliario en mal estado o se retirará mobiliario infrautilizado en alguna calle. Por el contrario, el espacio de la plaza de la supermanzana mantendrá todo el mobiliario. En cualquier caso, la definición definitiva de este espacio queda a la espera del inicio de las obras que tienen que convertir la supermanzana táctica en permanente, y que en Sant Antoni no están previstas hasta abril de 2026.