Un estudio del Banco de la reserva federal de Nueva York relaciona la crisis económica causada por la pandemia de la gripe española, entre los años 1918 y 1920, con el auge del Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán, conocido coloquialmente como Partido Nazi, según el diario israelí Haaretz.

A pesar de este estudio, expertos de la historia alemana durante el nazismo ponen en duda esta investigación y aseguran que es "escabrosa" e inexacto.

El análisis, publicado esta lunes por el economista del Banco de la reserva federal de Nueva York, Kristian Blickle, estudia los efectos de la gripe española que dejó a 50 millones de víctimas mortales por todo el mundo, entre los años 1918 y 1920.

El documento de Blickle afirma que "las muertes por gripe en 1918 se correlacionan con un aumento de la proporción de votos obtenidos por la extrema derecha, como el Partido Nacional Socialista de los Trabajadores" a las elecciones de Alemania de 1932 y 1933, que llevaron al poder a Adolf Hitler.

Blickle argumenta que las muertes por la gripe "provocaron el resentimiento de extranjeros entre los supervivientes", que con el paso del tiempo provocaron un mayor apoyo a los partidos racistas y xenófobos.

Esta investigación sugiere que la actual pandemia del coronavirus podría provocar otro aumento del extremismo político, particularmente en los Estados Unidos.

Algunos expertos dan importancia en esta tesis en un momento en que la preocupación crece, en los Estados Unidos, donde el paro aumenta a niveles muy elevados y la crisis económica que se está viviendo a causa de la Covid-19 deja signos de que los políticos están utilizando esta situación para fortalecer sus programas electorales con un mensaje racista y de bloqueo de su presidente, Donald Trump.

Un profesor de historia y asuntos internacionales en la Universidad de Aberdeen y autor de libros sobre Alemania y el auge del nazismo Thomas Weber, es escéptico. Asegura que las pruebas no tienen "ningún vínculo causal" entre el extremismo pandémico y el político, según Haaretz.

Weber, que escribió la "Primera Guerra de Hitler" del 2010 y la de "Convertirse en Hitler: la creación de un nazi", afirma que quedó "mucho sorprendido" de las conclusiones extraídas por una institución tan destacada como el Banco de la Reserva Federal de Nueva York.