La aparición de la nueva cepa del coronavirus detectada en el Reino Unido ha provocado desazón. Aunque no se ha demostrado que los efectos sean más graves, sí que se ha observado que es un 70% más contagiosa. Decenas de países, entre ellos España, han optado por cancelar sus vuelos con el Reino Unido para evitar su expansión. En este contexto, el laboratorio alemán BioNTech –que ha creado al lado de la farmacéutica Pfizer la primera vacuna autorizada contra la Covid– ha anunciado que es capaz de proporcionar una nueva vacuna "en seis semanas".

Aunque no se han detectado casos de esta nueva cepa en España, sí que se han detectado en la península. Gibraltar ha detectado casos y requerirá ahora una prueba PCR negativa a los pasajeros que vengan del Reino Unido. Por su parte, España sólo permitirá la entrada desde este país a españoles o residentes desde este mismo martes.

Qué se sabe de la nueva cepa del Reino Unido

Las mutaciones son un hecho habitual. De hecho, esta no es la primera mutación que ha experimentado el coronavirus. Por culpa de las mutaciones no es extraño, pues, que haya salido esta nueva variante. De hecho, el doctor Muge Cevik, miembro del grupo Asesor de Amenazas de Virus Respiratorios Nuevos y Emergentes (Nervtag) ha explicado que se han visto más de 4.000 mutaciones de SARS-CoV-2, pero muy pocas mutaciones han llegado a ser significativas.

De hecho, esta nueva cepa es un 70% más contagiosa y ha aumentado en un 0,4 la ratio de transmisibilidad. Sin embargo, no parece que pueda aumentar el riesgo de enfermedad grave o tasa de mortalidad.

En un texto publicado justamente por Nervtag y recogido por el diario británico The Guardian, los expertos aseguraban que tenían una "confianza moderada" por el hecho de que la variante demostraba un aumento de la transmisibilidad en comparación con otras variantes. Ahora bien, también han admitido que los datos son preliminares y se basan en modelos. "Aunque los resultados dependen de la calidad y la cantidad de datos que les proporciones, esta parece una variante potencialmente más transmisible", detallaba Cevik. A pesar de todo, no se puede establecer todavía una relación causal.

Los datos acumulados hasta ahora son consistentes con el hecho de que la variante es más infecciosa o capaz de propagarse de manera más rápida, pero no hay confirmación de laboratorio ni se sabe por qué se está propagando tan rápidamente, explicaba el profesor de virología del King's College de Londres, Stuart Neil. La variante se ha asociado a entre el 10% y el 15% de los casos. Pero lo que ha hecho saltar las alarmas es que la semana pasada fueron el 60% los casos detectados.

De momento, se cree que esta nueva cepa no tendría por qué afectar a las vacunas que se están desarrollando. De hecho, han sido diseñadas teniendo en cuenta que es inevitable que haya mutaciones. De esta manera, la comunidad científica cree que es muy improbable que no funcionen con esta nueva variante. Sin embargo, BioNTech asegura que, en este caso, podría proporcionar una vacuna adaptada en "seis semanas".