El pleno del Parlament de Catalunya vota este jueves la proposición de ley de Junts per Catalunya para modificar el decreto de sequía, que el Govern aprobó por la mínima y con la abstención de la oposición a finales de marzo. Los principales puntos de discusión eran el régimen sancionador y la reclamación de más inversiones. El ejecutivo de Pere Aragonès abrió la puerta a retocar lo que hiciera falta para convencer a Junts y PSC, y por eso convocó una cumbre del agua pocos días después, que también acabó fracasando. Ahora, tal como adelantó ElNacional.cat, Junts ha planteado 13 inversiones fundamentales para llegar a un acuerdo, a las que el PSC ha presentado algunas enmiendas. Ante un contexto adverso, ERC ha aceptado estas inversiones urgentes y una moratoria de un mes en las sanciones, según se desprende de las enmiendas presentadas.