El secreto profesional de los periodistas ha sido uno de los protagonistas de la tercera sesión del juicio del fiscal general del Estado con la declaración como testigos de seis periodistas. Por la mañana, ha sido el turno de Isaac Blasco (de Vozpópuli), Olivia Moya (de Libertad Digital) y Esteban Urreiztieta (de El Mundo). Por la tarde, el tribunal ha escuchado a José Precedo y Marcos Pinheiro (de elDiario.es) y Alfonso Pérez Medina (de La Sexta). Frente a algunas preguntas de las acusaciones, de la Fiscalía y de la defensa, ellos se han acogido al secreto profesional, el derecho que les ampara para evitar que tengan que revelar sus fuentes. Uno de los testimonios más reveladores ha sido el de José Precedo, que ha negado que el fiscal general del Estado, que está acusado de un presunto delito de revelación de secretos y se expone a penas de cárcel de cuatro a seis años, fuera la fuente que le facilitó el correo en el que el abogado de Alberto González Amador reconocía dos delitos fiscales: “En 22 años de carrera, Álvaro García Ortiz no me ha pasado un papel nunca. Y nunca es nunca”, ha subrayado. Ambos se conocieron en 2003 en la causa judicial del Prestige, cuando García Ortiz era fiscal delegado de Medio Ambiente.
Asimismo, ha verbalizado un “dilema moral bastante gordo” a la hora de declarar en el Supremo: “Yo sí sé quién es la fuente de esta historia, no la voy a decir por secreto profesional”. Una declaración que ha levantado la reprimenda del presidente del tribunal, Andrés Martínez Arrieta: “Una cosa es que no la diga, pero otra cosa es que nos amenace con que la sabe”. “No amenazo a nadie, digo que está el dilema moral de que haya una persona a la que se pide cárcel, que yo sé que es inocente porque conozco la fuente, pero no puedo decir mi fuente, es un dilema moral”, ha contestado él.
Consiguió el correo una semana antes que el fiscal general del Estado
José Precedo ha relatado que tuvo acceso al correo del 2 de febrero (el de la confesión de la pareja de Ayuso) el 6 de marzo, una semana antes de que fuera remitido al fiscal general del Estado. El informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sobre los mensajes de Pilar Rodríguez (la fiscal jefe provincial de Madrid) revelaba que ella reenvió a Álvaro García Ortiz el correo a las 21.59 horas procediendo del fiscal Julián Salto. De hecho, el 6 de marzo Precedo recibió una “triple documentación” de su fuente: “El expediente tributario de González Amador, la denuncia y el correo del 2 de febrero”. “El 6 de marzo sé que hay un correo del 2 de febrero y lo tengo”, ha subrayado. Y ha puntualizado que era un “pantallazo en papel”. Más tarde, ha declarado Marcos Pinheiro, que ha avalado la versión de su compañero y ha afirmado que “sabía” que tenían el correo desde el 6 de marzo.
“La fuente no nos permite publicar el pantallazo, no lo puedo exhibir”
“¿Por qué no publican nada relacionado con ese documento?”, ha preguntado Gabriel Rodríguez-Ramos, el abogado de la pareja de Ayuso, a José Precedo. Él ha explicado los motivos de ello: “No publicamos nada porque el correo famoso tiene una reserva, que es que no podemos publicar el pantallazo. La fuente no nos lo permite. [...] Lo tengo, pero no lo puedo exhibir”, ha justificado. Siete días más tarde, el 13 de marzo a las 21.29 horas, El Mundo publicó la noticia en la que aseguraba que la Fiscalía había ofrecido un pacto a la pareja de Ayus. “Al leer la información de El Mundo, a mí me quedan dudas de quién empezó esta conformidad. Sé que el correo de El Mundo es posterior al mío, lo que no sé es qué hay antes y qué hay después”, ha reconocido José Precedo.
El primer medio a desmentirlo fue La Sexta, que contó que la secuencia había sido al revés. En ese momento, elDiario.es citó a La Sexta, pero no podía compartir la prueba que tenía desde hacía días: “Sigo sin saber si puedo reproducirlo, que es lo que me gustaría”, ha recordado Precedo. Finalmente, a la una de la madrugada, consiguió cerrar el círculo: “Esa noche estoy haciendo llamadas todo el rato. A la una, la fuente me confirma ‘El que tienes tú es el primer correo, no hay otros correos anteriores, la conformidad parte de los abogados de González Amador y el orden es el lógico’. Cuando tengo eso atado, vamos con nuestro correo”. Sin embargo, todavía no podía publicar el documento del correo. No fue hasta el día siguiente por la mañana adjuntaron el original: “Que lo publiquen otros medios facilita que la fuente original me permita utilizar la imagen que me tenía vetada durante todos esos días”.
“Voy a hacer averiguaciones para ver hasta dónde se sabe esto”
Volvemos atrás. El 6 de marzo, después de conseguir la documentación, José Precedo habló con el director de elDiario.es, Ignacio Escolar, que le pregunta qué tiempo tenían para preparar la información. “Yo digo que voy a hacer averiguaciones para ver hasta dónde se sabe esto”, ha relatado. Posteriormente, José Precedo llamó a Mar Hedo, la jefa de prensa de Fiscalía General del Estado, que declaró ayer como testigo: “Le pregunto si en la Fiscalía General del Estado hay alguna denuncia relacionada con Maxwell Cremona [la empresa de Alberto González Amador]. No sé si digo el nombre de Alberto González, sé que no doy todo el nombre y sé que, desde luego, no digo que es novio de la de la presidenta de la Comunidad de Madrid”, ha recordado.
Y ha justificado su hoja de ruta: “No lo hago porque esa llamada la hago para intentar saber cuánto tiempo tenemos para empezar a publicar, si se va a dar una nota de prensa y si hay otros medios preguntando”. “¿Qué información recibe?”, le ha preguntado el abogado de Alberto González Amador. “Ninguna”, ha contestado él. Pero se dio por satisfecho: “Es lo que me interesa para saber que tenemos tiempo para manejar toda esta documentación”.
Un periodista de La Sexta compartió el contenido del correo cinco minutos antes de que lo tuviera el fiscal general del Estado
La sesión de tarde la ha cerrado Alfonso Pérez Medina, el jefe de Tribunales de La Sexta. Ha relatado que a las 21.54 horas envió el contenido del correo del abogado Carlos Neira en el grupo de WhatsApp de tribunales de la cadena. Eso fue cinco minutos antes de que el correo llegara al buzón personal del fiscal general del Estado. “La información está preparada a las 21.54 horas, que es cuando yo vuelco el comienzo de esa información. Luego, hubo muchos más mensajes en ese chat. A partir de ahí, los compañeros cogen esa información. Yo les guío con el titular y con el enfoque, y ellos la maquetan, le ponen la fotografía y la lanza”, ha expuesto. “¿Su fuente era la Fiscalía?”, le ha preguntado el abogado de Alberto González Amador. “Eso afecta al secreto profesional de forma evidente”, ha contestado. “Tres fuentes distintas me contaron el contenido de los dos correos y confirmé que el acuerdo de conformidad partía de la defensa del investigado y la Fiscalía se aviene a la posibilidad de estudiarlo”, ha apostillado.