El primer Consejo de Ministros después de las vacaciones ha tenido un claro protagonista: la crisis de Afganistán. La evacuación del personal diplomático y los colaboradores afganos de las fuerzas occidentales ha sido una oportunidad para el Ejecutivo de Sánchez para brillar en la escena internacional. Cuando la portavoz y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, ha atendido a los medios se ha deshecho en elogios hacia la gestión de su propio gobierno, que ha recordado que ha sido reconocida por líderes de todo el mundo. Sin embargo, ¿que pasará con los refugiados afganos a partir de ahora? Para eso no hay respuesta.

"La prioridad ahora es la evacuación". Este ha sido el mantra de Rodríguez ha repetido ante todas las cuestiones que se le han preguntado sobre la crisis de Afganistán. Ningún periodista ha podido arrancarle una respuesta más allá de esta.

Una de las cuestiones fundamentales sobre el futuro de los refugiados afganos, más allá de las 72 horas que pasan en la base militar de Torrejón de Ardoz (un tiempo del que el Ejecutivo se muestra muy orgulloso), es qué garantías jurídicas les da el Gobierno a aquellos que pidan asilo al Estado. Se trata de una cuestión crucial en la gestión de una crisis humanitaria como esta que ha quedado sin respuesta.

El Gobierno respecto de la crisis con Afganistán está viviendo el ahora y evita dar detalles sobre la regularización de los demandantes de asilo. ¿Qué planes hay para el futuro de esta gente? "La prioridad ahora es la evacuación". Y así una vez y otra. Incluso cuando un periodista le ha pedido Rodríguez que valorara la actuación de los Estados Unidos en Afganistán ha jugado esta carta. La portavoz ha esquivado la pregunta y ha vuelto a repetir: "Nuestra prioridad es la evacuación, ya habrá tiempo en el futuro para hacer análisis políticos".

No es país para refugiados

Por mucho que lo repita el Gobierno de Sánchez, los datos nos indican que España no es el oasis idílico de acogida que se ha prometido. Entidades pro refugiados han recordado estos días que el Estado español solo acepta el 5% de las solicitudes de asilo que recibe, cuando la media europea es de una aceptación del 30%.

El presidente de la Comisión Catalana de Ayuda al Refugiado, Miguel Pajares, ha expresado su indignación ante la propaganda que está haciendo el Ejecutivo con esta crisis humanitaria. "España no está siendo un referente en temas de asilo", ha sentenciado. No solo la baja aceptación de solicitudes de asilo apoyan esta afirmación, también lo hace la práctica de "devoluciones en caliente, últimamente de los menores", ha recordado Pajares.

Con ratios muy bajas de aprobación de solicitudes de asilo, el ministro de Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, comunicó el lunes que ya habían llegado 566 refugiados afganos a la base militar, y que más de la mitad ya habían solicitado protección internacional en España. Habrá que esperar para ver si la tendencia general en la política de acogida española se repite en el caso de los afganos evacuados o este seguirá siendo un trato solo dirigido a los refugiados de países que no abren portadas.

 

Imagen principal: La vicepresidenta y ministra de política Territorial, Isabel Rodríguez, durante una rueda de prensa / Efe